viernes, 8 de septiembre de 2017

1818* Porque hay algo que te vende, yo no sé si es la mirada, la manera de sentarte, de vestir, de estar parado o tu cuerpo acostumbrado a las pilchas de percal




N° 1818  | 8SEP2017 | Año 12

Más allá de Sendic

Leonardo Haberkorn
blog el informante 6.9.17


Sendic tiene tres grandes frentes abiertos: su inexistente título de licenciado en genética, sus decisiones como presidente de Ancap y el uso que hizo de las tarjetas corporativas de esa empresa estatal

El Título

A esta altura está claro que Sendic no es licenciado y que mintió durante años cuando se presentó de esa manera, e incluso cuando hizo alarde de su condición de licenciado en genética humana en el Parlamento.

Fue el propio Sendic quien le dijo a la periodista Patricia Madrid, en El Observador, que nunca había cumplido una verdadera licenciatura.
Luego, en lugar de mantenerse en eso, de disculparse y decir que él había dicho la verdad la primera vez que alguien le había preguntado concretamente por el punto, fue y vino, dijo que sí era licenciado, que mostraría el título, habló de reválidas, de cursillos dados y cursos futuros, que sí, que no, todo un fárrago de explicaciones contradictoras que solo empeoraron su situación.


El título nunca apareció. Se demostró que la carrera en la que durante años dijo haberse licenciado ni siquiera existe en Cuba.

Que un político -un vicepresidente y presidente del Parlamento- mienta en algo tan concreto, personal y tangible no es un tema menor. 

La mentira lo tiñe todo. Siembra el descrédito, la desconfianza. Es imposible construir sobre ella.


La mentira de Sendic arrastró hacia ese fango a todos los que salieron en su defensa.


A la senadora Lucía Topolansky, que dijo que había visto el inexistente título. A la fiscalía y la justicia que, con una sorprendente interpretación del código penal, determinaron que Sendic no había incurrido en el delito de usurpación de título porque la carrera de licenciado en genética humana no existe en Uruguay. Y al Frente Amplio todo, porque su plenario -en lugar de hacer lo que correspondía- se mintió a sí mismo, desconoció los datos de la realidad y afirmó que todo era un complot golpista de la prensa y la oposición.



Con ese elevadísimo costo para su partido y para las instituciones, Sendic logró sortear la crisis de su falsa licenciatura ante su partido y ante la ley.
Pero no ante la opinión pública, donde todo el mundo tiene muy clara la verdad

Tarjetas Corporativas

Los otros dos frentes de Sendic están vinculados entre sí y tienen que ver con su gestión en Ancap, pero son radicalmente distintos en su alcance e importancia.


De lo que estamos hablando hoy es del uso que hizo Sendic de la tarjeta corporativa de la petrolera, con las que hizo compras insólitas para un presidente de una empresa pública y que el propio Sendic no pudo explicar ante el Tribunal de Conducta Política del Frente Amplio, que analizó este caso


De lo que se habla menos es de algo más importante: el manejo de dinero en las compras e inversiones de Ancap mientras Sendic fue su presidente, que terminaron generando un agujero de casi 900 millones de dólares.

Eso no ha sido analizado por el Frente Amplio. 

Está en manos de la justicia penal porque lo denunciaron los partidos de la oposición.


Ambas cosas tienen relación con Ancap y con Sendic, pero no son iguales.
Cuando Sendic decidió adquirir un short en La Paloma con dinero de Ancap es de suponer que no consultó con nadie más, que por algún motivo poderoso decidió que estaba en su derecho a usar ese dinero público para ese curioso fin.

Lo mismo cuando pasó la tarjeta de Ancap por la caja en Devoto, en Divino y en tiendas de ropa y aparatos electrónicos en distintos lugares del mundo.
No es un asunto menor. 


Porque los funcionarios públicos -incluso los más elevados- no deben olvidar que el dinero que manejan es el de todos, que deben rendir cuentas de lo que hacen, que el Estado no es su feudo.

Es importante también porque con las carencias que padece el Estado uruguayo en áreas básicas, como salud, seguridad, justicia y enseñanza, indigna que el dinero se gaste en shorts de baño.


Pero estos fueron actos individuales. Hechos protagonizados por un individuo que decía ser licenciado de una carrera inexistente. Anécdotas.

ANCAP

Lo que pasó en la gestión de Ancap, en cambio, no es una anécdota. No es anecdótico que el Estado haya tenido que poner 872 millones de dólares para que la compañía no quebrara, tal era su déficit.


No es anecdótico que todos los uruguayos estamos pagando hoy, cada día, de modo directo o indirecto, uno de los combustibles más caros del mundo para tapar este agujero. Y que esa contribución al salvataje de Ancap nos chupe parte de nuestros sueldos.


Semejante déficit no se generó por decisiones aisladas, curiosas, individuales de Raúl Sendic. Primero, porque en Ancap existía un directorio, también integrado por la oposición.


Segundo, porque la magnitud de los negocios e inversiones emprendidos por la mayor empresa pública del Uruguay durante la presidencia de Sendic, no podía ser desconocida para el presidente José Mujica ni para el vicepresidente Danilo Astori ni para el equipo económico y otras autoridades.


Cuando el dinero de todos los uruguayos se usó para comprar un short en La Paloma, todos pueden decir que no sabían.



Pero no pueden decir lo mismo de la millonaria campaña publicitaria en televisión de Ancap, pagada con dinero público y cuyo eslogan luego fue usado por el propio sector de Sendic.



No pueden decir lo mismo de la millonaria fiesta que realizó Ancap con nuestro dinero en honor de la entonces presidente argentina Cristina Fernández.
Y los ejemplos podrían seguir con los negocios de la cal, los contratos con la Armada, ALUR, etc., etc.



El plenario del Frente Amplio analizará el sábado el "caso chico" de Ancap (el short de La Paloma) pero estará sobrevolando el "caso grande" (872 millones de dólares).


El propio dirigente y exsenador del MPP Ernesto Agazzi dijo a Montevideo portal respecto a cómo analiza el expresidente Mujica la actual situación: "Mujica era el superior jerárquico de Sendic, cuando él era presidente de la República y Sendic el director de Ancap. Creo que el enfoque de Mujica es ese y él tiende a mirarlo desde ahí"



Hablando de otro desastre de gestión pública, Mujica había dicho que se haría responsable de todo lo ocurrido en Pluna.


Pero, a la hora de la verdad y ante la justicia, no fue así y los únicos responsables fueron Fernando Lorenzo y Fernando Calloia, sacrificados por la causa.


¿Pasará lo mismo en Ancap?



Son los cálculos que algunos están haciendo esta semana: en estas horas el "caso grande" de Ancap explica muchas de las posiciones del "caso chico".
¿Quién pagará? 

¿Quién se hará responsable? ¿Qué podemos hacer para que el incendio no siga creciendo? 
¿Hasta dónde llegará la historia?

- postaporteñ@ 1818 - 2017-09-08 





¿Volverá el Frente Amplio?


Una opinión personal


Y de pronto se borraron la mujer, el vino, el fuego - Que sostenía las carnes,
el temple del instrumento


No es sobre si el FA volverá a ganar las elecciones en 2019. Hablamos de los cambios orgánicos que viene viviendo el partido de gobierno en una evolución frente -> partido -> ¿frente?. En este proceso, importan los movimientos tectónicos que lo determinan.


En 1971 el Frente Amplio nació como"coalición y movimiento" reuniendo fuerzas de izquierda de muy distinto tipo, y además una amplia militancia social no encuadrada en éstas que tuvo sus propias formas de expresión y representación dentro de la estructura, aunque siempre  limitada por el marco del acuerdo interpartidario, que a su vez requería cierta flexibilidad de cada uno de los partidos, todo ello bajo una clara y expresa hegemonía reformista. Un fenómeno complejo hasta para decirlo.


La lucha de clases fue modificando las cosas en el plano de la expresión orgánica. Nunca se rompió la hegemonía reformista, por el contrario, se profundizó por dos elementos fundamentales.


La dictadura militar golpeó a toda la izquierda pero mucho más a los sectores combativos, y la recomposición del Frente a su salida reflejó ese desbalance. Y luego el proceso de llegada del Frente al gobierno implicó toda una adaptación política, ideológica, programática y práctica a los imperativos del régimen burgués: de partido de la alternativa a partido de la alternancia.


Las formas orgánicas fueron expresando y acompañando este proceso, y a su vez los cambios de forma fueron una herramienta para realizar los cambios de contenido. Esos cambios de forma política fueron, básicamente, dos.
Primero, el "movimiento" se fue desmantelando y desvirtuando a la vez. Segundo, la coalición se transformó en partido.


Nos interesa agregar un tercer proceso, el "partido" pasó a ser mucho más centralizado y vertical. Nos interesa, porque es allí, en ese plano, que se produce la actual crisis interna que hoy ocupa la escena.


Pero para entender la parte tenemos que entender el todo.

Vamos a explicar a qué nos referimos con "cambios tectónicos". En el comienzo, hubo en el Frente una tensión entre distintos proyectos políticos (realidad para la cual se usó el eufemismo "frente policlasista") que se saldó por la imposición de la "izquierda de lo posible", es decir, un programa de reformas parciales limitadas explícitamente a la necesidad del capitalismo. 

A su vez, para que ese proceso de reformas fuese posible, se necesitaban ciertos cambios en los instrumentos institucionales, en el propio Frente Amplio y su relación con el Estado. 

Es en ese plano que vemos también un fenómeno que es muy conocido: un instrumento político, de medio para un fin, pasa a ser un fin en sí mismo. 

En este caso, el fin es gobernar. No para llevar adelante un programa o una causa, sino para gobernar.


¿Quiénes resultarían beneficiados en dichos cambios parciales dentro del capitalismo, en qué grado cada cuál?


Creo que la respuesta más clara la ha dado Tabaré Vázquez en su discurso de los "MALAGRADECIDOS", reunión abierta del gabinete ministerial en Nuevo Berlín, 14/08/2017 (1). Ante reclamos de personas en verdadera situación de miseria, no tuvo mejor salida que hacer un recuento de las "gotitas" que han brindado los gobiernos frentistas, lo peor que estábamos antes, y terminar con un reproche a las malagradecidos a los que nunca les alcanza.

 Que esta respuesta no haya pasado a la antología de la soberbia y la desubicación es otra muestra de la obsecuencia de los medios. Pero ha servido para poner en negro sobre blanco su filosofía de gobierno.


Dije "gotitas" por algo. La "teoría del derrame" es la forma de justificar la explotación capitalista, los empresarios -propietarios de los medios de producción- deben ganar para así generar empleo, y bienes y servicios que pueden ser consumidos por los trabajadores- El rendimiento del trabajo para los empresarios es el que trae las mejoras posibles para los trabajadores. El Frente Amplio ha asimilado ese planteo por completo, de modo que las pequeñas mejoras en las jubilaciones que siguen siendo miserables, las muy atrasadas conquistas en condiciones laborales de los trabajadores rurales, son los "cambios posibles". GRACIAS al Frente Amplio hay gotas de derrame. Para ello, el capitalismo tiene que funcionar. 

Para ello a su vez, los trabajadores tienen que adecuarse a ese funcionamiento -aceptar el régimen de "esencialidad" por ejemplo- y si reciben algunas gotas más, agradecer.


En su fundación el FA tuvo una llegada relativamente policlasista, trabajadores organizados y algunos sectores medios instruidos. Fue con el tiempo que se empezó a lograr la llegada masiva a los sectores populares más carenciados, los barrios marginales, el interior rural. 

 Pero si bien la base social electoral del Frente tuvo ese alcance, el aparato partidario ha tenido una base social diferente. Allí hay un predominio neto de los sectores medios; los cuadros de origen obrero han sido cernidos y educados primero por su pasaje por la burocracia sindical, que a su vez ha cobrado un mayor desarrollo a partir del gobierno del Frente, desarrollo cuantitativo y cualitativo, profundizando también su diferenciación del resto de la clase (dirigentes de tiempo completo). 

La llegada del Frente al gobierno, en un país de limitadas posibilidades de carrera profesional, académica, o de cuadros gestores especializados, hace del aparato del Estado (y el universo para-estatal de ONGs, empresas contratistas, estudios profesionales, etc.,) un botín para esos sectores medios. 

El FA comienza a ocupar el lugar de "partido del Estado" que era el Partido Colorado.
Así, el FA es "policlasista" en una forma muy singular. Convoca a los votantes de sectores populares pero se constituye orgánicamente con cuadros de sectores medios, tanto en su burocracia partidaria interna como en su contraparte de gestión en el aparato estatal y para-estatal.

 Los intereses de clase de estas dos grandes franjas sociales son muy diferentes, y las "gotas por derrame" que reciben en el funcionamiento del capitalismo, también. 
Esos intereses diferentes pueden ser satisfechos en forma desigual pero manejable, dentro de ciertas condiciones coyunturales, que fueron favorables en los primeros años de gobierno frentista, pero ya no lo son.


La economía "crece" pero aumenta el desempleo. El país tiene grado inversor, pero los mega-proyectos de inversión extranjera directa terminan en grandes fiascos (si no en juicios al Estado). Y es así que vemos como este agotamiento del "derrame" empieza a generar tensiones sociales que ya no pueden ser manejadas con tanta holgura. 

El discurso del Frente levanta la bandera de la negociación colectiva, pero el Estado como patrón abandona la negociación con sus propios trabajadores.
Y a eso nos referíamos con "movimientos tectónicos". 

La conjunción de intereses de esas dos franjas sociales es cada vez más difícil. 

Pero es obvio que los problemas del "derrame", aunque en forma desigual, les llegan a todos. Y es así que vemos las tensiones en esa base social "policlasista" de dos patas. Y eso es en última instancia lo que explica las actuales tensiones internas delpartido de gobierno


Vamos entonces a las consecuencias orgánicas.


Un artículo difundido en estos días de Fernando López D'Alesandro sobre la crisis del Frente y Sendic me ha llamado la atención. 

Dice en una parte lo mimo que yo acá sobre la imbricación del Frente con el aparato de Estado al modo anterior del Partido Colorado, pero esa idea no la inventó él ni mucho menos yo, de modo que no es para asombrarse, ya es un lugar común. Pero luego leo estas cosas:


"...bajo el sopor de la Revolución Cubana, la cultura política de la izquierda uruguaya fue teñida por la impronta comunista. El aparato cultural, hegemonizado por la moda revolucionaria...[Y a continuación hablando de Raúl Fernando Sendic luego de sus años en Cuba] la impronta vertical a la cubana... tienen esa forma de... verticalidad autoritaria". (2)


¡Eso se llama ver el ratón y no el elefante! ¿Sendic es el verticalista del FA? ¿Te olvidaste de Tabaré Vázquez?


Como dijimos, la "coalición y movimiento" pasó primero a ser coalición lisa y llana, con un "movimiento" controlado por los aparatos partidarios.

 Pero luego esos distintos partidos particulares fueron perdiendo su autonomía política, y pasaron a ser, de hecho, fracciones de un partido macro. Ninguno de ellos sobreviviría si se escindiese de ese partido macro, o si el mismo se quebrase. Han dejado, por lo tanto, de ser partidos cada uno por su cuenta en el sentido estricto de la palabra, y son partes de un partido.


Pero a su vez ese partido comenzó a tener una dinámica de centralización cupular. 

El hoy tan mentado "Tribunal de conducta política" vino siendo en realidad durante todo este tiempo -más que un guardián de la ética- un órgano disciplinario, pero la llamada disciplina partidaria ha venido funcionando de hecho, como una subordinación política verticalista. Y por supuesto que no tiene absolutamente nada que ver con una "impronta cubana", es bien uruguaya. No se trata, por otra parte, de un "centralismo democrático", o lo que quiera eso decir. Es un centralismo burocrático cupular sin discusión, que tiene un mando único en el gobierno mismo. El gobierno manda al partido

. El drama del "voto 50" no tiene sentido si no se entiende dentro de este estilo político.
Si queremos verlo en un caso, tomemos la participación uruguaya en la ocupación militar de Haití. Como hemos hablado de este tema largamente, no volveremos a él aquí, pero es un ejemplo clarísimo de imposición vertical de una disciplina sin discusión y sin derecho al pataleo, sin derecho a "objeciones de conciencia", e impuesto a los órganos partidarios desde la cúpula del gobierno.
Ese proceso de centralización autoritaria tuvo su punto máximo en los primeros años de la primera presidencia de Tabaré Vázquez.

 Hacia el final del mandato comenzaron los problemas, que tuvieron sus quiebres, en especial el fracaso en la imposición del "delfín" designado Astori. La presidencia de José Mujica tuvo un estilo algo distinto, dejaremos eso de lado.


Cuando el retorno de Vázquez a la presidencia se intentó reimplantar ese ultra-centralismo. Véase por ejemplo la designación del gabinete. Pero poco se logró, y cada vez menos. Las diferencias internas empezaron a aflorar en forma mucho más evidente, y los llamados a silencio y obediencia del jefe de poco han servido.
Hoy, el Frente se parece bastante más a un frente. La disciplina ha cedido ante la negociación. Tratemos de entender a qué se debe.


Por supuesto, Tabaré Vázquez es un enfermo de soberbia y autoritarismo. Ha llegado a actitudes que lo ponen en ridículo, como enojarse con los medios de prensa uruguayos porque en la cumbre de presidentes en Mendoza le dieron más importancia a los problemas con Venezuela o a inauguración de la venta de marihuana en farmacias (ambos temas que concitan la atención mundial) que a que ÉL recibió un premio... (3) 

Probablemente un caso de complejo de inferioridad sobre-compensado, pero dejemos ese tema menor.
El problema no es la persona Tabaré Vázquez sino en contexto político que pone en la escena a ese personaje, lo construye, y lo que pasa cuando ese contexto va cambiando. 

Y, a su vez, cómo ese contexto de superficie es afectado por los movimientos "tectónicos" de la lucha social. Con esto no queremos decir ni por asomo que una de estas dos "alas" que hoy se presentan esté representando al "pueblo". Por cierto que no. Se trata de una contradicción intra-burocrática, pero debemos entender por qué ocurre.


Vamos a tomar de la antropología las formas políticas del "jefe distribuidor" de la caza y el "jefe recaudador"· de la agricultura (4). Los jefes no son un fenómeno natural, ni son inevitables, ni la mayoría de las veces la mejor opción. Son un fenómeno histórico, y las formas de jefatura dependen de las condiciones materiales de la vida y sus necesidades.


La llegada del FA al gobierno significó, para ese estamento burocrático de sectores medios, cobrar la presa del Estado. 

Pero en las condiciones del recién llegado, y sobre todo por las garantías que debían darse por el terreno que se entraba a ocupar, se impuso la dinámica de una sola canilla y uno que la maneje. Ese fue el centralismo del primer Tabaré. La autoridad no viene ni del carisma ni del talento, viene del control material, que a su vez viene de esas condiciones de la llegada. 


A medida que la burocracia frentista va ocupando los lugares del terreno, en vez de caza vemos algo más parecido a la agricultura en parcelas, donde cada uno es responsable de lo que produce. Hay que pagar un tributo (no son dueños absolutos de sus ganancias como ya se ha visto) y someterse a un control. 

Pero ahora cada productor ha adquirido en cierta medida su derecho a voz y voto. Esto no ocurre de un día para el otro y mucho menos sin conflicto, pero ocurre. El jefe autoritario da órdenes y órdenes, pero que se cumplan es otra cosa. "Ya no se escucha tu canto". En realidad debería ser el suyo un papel diferente, el papel de un "primus inter pares", un coordinador, un articulador. Pero sería pedirle peras al olmo. 


Así y todo, los problemas más o menos podían sobrellevarse en los años de buenas cosechas. Pero vinieron los años de malas. 


El Frente no ha logrado una "renovación generacional" porque ha sido presa de su propia herencia maldita de autoritarismo (que repetimos, nada tiene que ver con los cubanos, ni los rusos ni los chinos ni los japoneses) y ahora ya es tarde. Ahora ya no es la autoridad del reparto sino la guerra del reparto.


Sólo nos queda un punto, lo de las "dos alas". Las dos son burocráticas, la diferencia está en lo que se está dispuesto a ceder en el ordeñe al Estado y lo que no. 


Un ala está tratando de sobrevivir en la "alternancia". Comenzar a tender puentes por si las moscas, hoy por ti y mañana por mí. Es el ala de hacer buena letra. La otra sabe que por ese camino lleva las de perder, va a ser sacrificada. Es el ala "internista" que trata de resucitar los viejos tiempos.

Y así, el Frente tiene de nuevo apariencia de frente. Lo curioso es que esta situación producto de la decadencia política, lo puede beneficiar. 


Lo primero que hay que entender es que en esta coyuntura histórica y tal como están las cosas en Uruguay, el FA sigue siendo la primera opción de la clase dominante. Ya tiene otras por las dudas en los viejos partidos burgueses tradicionales, pero no sólo no se han recuperado sino que cada vez están peor, y hasta peor que el Frente.


En esa situación la polarización interna puede ser un motivo de arrastre desde puntos diferentes, eso ya fue usado largamente por los viejos partidos burgueses tradicionales, cuando todavía estaban. 

Es la dinámica del "enemigo íntimo", optar por uno de los bandos de esa polarización interna pude ser pensado como un "voto útil" para que no gane el otro bando, y así todo suma.


De cualquier manera la decadencia del Frente es irreversible. Ya sin mujer ni vino ni fuego, lo que lo sostenía, qué se puede esperar del pobre "instrumento"...  va a hacer un papelón.



Materiales citados:


(1) http://ecos.la/UY/9/actualidad/2017/08/14/16332/mujer-reclamo-a-vazquez-porque-cobra-3260-y-no-puede-pagar-facturas/


(2) "La crisis del Frente Amplio no es sólo Raúl Fernando Sendic", Fernando López D’Alesandro, la diaria, 26/08/2017


(3) http://www.elobservador.com.uy/vazquez-molesto-medios-uruguayos-cobertura-su-honoris-causa-n1100540


(4) Los textos son numerosos, pero puede encontrarse una exposición breve en: Marvin Harris, Jefes, Cabecillas, Abusones https://asodea.files.wordpress.com/2009/09/harris-marvin-jefes-cabecillas-y-abusones.doc


En mi blog: https://n0estandificil.blogspot.com.uy/2017/09/volvera-el-frente-amplio-opinion.html



FERNANDO MOYANO - postaporteñ@ 1818 - 2017-09-08 




Precisamos Inversiones Extranjeras, ¿Para Qué?

Julio de la Llana


Para jodernos. Para que nos jodan. Tanto nos cuesta ver, que de ellas, ningún provecho tenemos.

Dígame alguna, que nos trajera trabajo y “progreso”, que no fuera provisorio.
Por ejemplo: las pasteras. Uno o dos años, mientras se edifica la procesadora de troncos. Después, son mayores los perjuicios, y pérdidas de empleo, que las ventajas que trae al pueblo uruguayo. Ni hablar, de la contaminación generada. Claro, gran responsabilidad no haber exigencias ambientales.

Claro, además no es posible. ¿Por qué? dirá usted y nosotros le respondemos, en POLÍTICAS ENTREGUISTAS compitiendo con otros, es casi imposible ponerse exigentes. No lo había observado desde ahí.

¿Inversión?  Ninguna. ¿Cómo ninguna? No.

Esto precisa una explicación, dirá usted. De lo contrario, es una afirmación, sin fundamentación.

Los dueños de las pasteras, (“inversores”) han “exigido”, que URUGUAY solicite un crédito y que el Estado uruguayo, sea garante del mismo.
Es decir todos nosotros. Y usted, no sabía nada. “Cosas que pasan” decía Larralde.

¿Se da cuenta? No invirtieron nada. Somos nosotros los inversores y son otros los beneficiarios.


Todo esto tiene que ver, con lo que se denomina dependencia de los países y creación de endeudamiento. La deuda externa. ¿Por qué ocurren estas cosas? No me diga que no tuvo la tentación, de preguntarse esto-
Vio lo que nos ocurrió con la venta de marihuana y los bancos.


Resulta que el BROU, el Banco País, no tiene libertad, para recibir depósitos, dinero (electrónico o no) de la venta de marihuana, algo basado en el propósito del EJECUTIVO, Y respaldado, por una LEY aprobada, en Nuestro Parlamento.
¡! Hasta aquí hemos llegado!! ¿Seguiremos de largo?


¿Qué habrán firmado nuestros gobernantes? No, de hoy, esto lleva décadas.
Escucho a la “Oposición” denunciar esto. No, lo pasan por arriba. Lo ignoran. ¿Por qué? Saben muy bien que, todo esto viene de las Cartas Intención firmadas con el Fondo Monetario Internacional, y lo que ello implica.


¿Cuándo se firmaron esas CARTAS INTENCIÓN? Si, en el primer gobierno blanco, cuando se derrotó “al comunismo chapa 15”

A partir de allí, el URUGUAY NUNCA SERÁ IGUAL. Entró por el nefasto sendero de la  ENTREGA. Se entró a ENDEUDAR, sin que existiera necesidad alguna. ¿Qué intereses y beneficios, empujaron ese endeudamiento?

La OLIGARQUÍA del Uruguay (mil o dos mil familias); entre ellas, los grandes latifundistas y los frigoríficos (todavía, no tan extranjerizados) recibían  debido a los recursos que desde URUGUAY, SE DESTINABAN A PAGAR INTERESES, y que “los gobernantes” se encargaban de pedir cuotas extras (cupos chicos)  de buen precio, en las ventas de carne vacuna.

 Ello, implicaba dinero extra para frigoríficos y estancieros involucrados, en su paquete accionario.
ELLOS, entre otros,  son los interesados en mantener la DEUDA EXTERNA, INNECESARIA. 

Que paga el pueblo con impuestos, y los pequeños y medianos capitales.

 Base mayoritaria, de la carga impositiva. Aparte, a partir de emisiones de más deuda (por parte del ESTADO) QUE PAGA INTERESES, está allí esa OLIGARQUÍA, entre otros, beneficiándose.

 Esto han hecho “sus gobernantes “, que usted ha elegido desde la década del 60 hasta acá.
Toda esta situación de entrega, empieza con el primer gobierno del Partido Nacional; tan grave es el retroceso que  cuando vuelve el Partido Colorado (año 1966) éste no hace más que continuar con los compromisos asumidos con todos los organismos internacionales (B. Mundial, O.M.C., CIADI, BID, ETC.) QUE EXIGEN, acatar y servir, a la banca mundial y a las grandes empresas transnacionales. Para ello, no practicar (entre otras medidas), la protección de las producciones locales. 

Con lo que ello trae, de pérdida de empleo local. Pusimos CIADI, debimos consignar que esa joda de “arreglo de litigios internacionales”, rige desde 1968. Pero recién en el gobierno del Dr. Luis Alberto Lacalle Herrera (año 1993), URUGUAY adhiere al CIADI. Le han disputado al Partido Colorado, el primer puesto para ceder SOBERANÍA.


Este actual sistema capitalista, es verdaderamente asesino, expropiador y concentrador, de las riquezas en muy pocas manos. Existe de todo, menos justicia social. A medida que crece la desocupación, crece lo delincuencial. Que no se resuelve, solo acrecentando más empleos en el Ministerio del Interior. ¡! 

Lo saben!!

¡! SÍ HABRÁ PARA ESCRIBIR!!

Y la esperanza de cambios, el F.A. se plegó a la ENTREGA. CONTINUISMO TOTAL.

De allí, la necesidad de crear el partido político UNIDAD POPULAR, lema Asamblea Popular.

SALIDAS. La única posibilidad es la organización ciudadana y popular, ¡en serio!!  Barrio  por barrio, empresa por empresa levantando un PROGRAMA de contenido POPULAR Y NACIONAL. NO AL SERVICIO DE LA BANCA MUNDIAL, Y DE LAS EMPRESAS EXTRANJERAS.

Parte de Nuestro pueblo, tiene aún la ilusión de poner un papelito cada 5 años, y encontrar mágicas soluciones.

Reiterando, hemos llegado al límite de votar leyes (legalización y venta de marihuana) y no poder instrumentarlas, porque el URUGUAY, carece de soberanía.

 Y no es de ahora. Solo se va agravando. La deuda externa, es un nudo crucial a cortar


Volvamos a las “inversiones” extranjeras.


Las inversiones extranjeras que tenemos solo sirven a pocos intereses. Son poquísimos, quiénes se BENEFICIAN. Sectores oligárquicos del País. LOS GRANDES PROPIETARIOS DE TIERRAS. 

Y el capital transnacional.
ESTOS, a partir de mil hectáreas, de 5 mil, de 10 mil o 100 mil hectáreas les SIRVE, plantar eucaliptus transgénico. Algunos, a partir de menor territorio.
Se usa defoliante, herbicidas, durante uno o dos años. Después, el árbol crece solo. Ni siquiera se hacen los “cortafuego”, ni se los exigen. Buen abrigo para jabalíes, entre otros detalles.

Al cabo, de 8 o 10 años, se corta. Se acabaron, las cuadrillas de cortadores. HOY, la máquina y el grapo, hacen el trabajo. Cero empleo.
A esos grandes propietarios les sirve plantar troncos. Poco trabajo y gastos. “Ingresos seguros”, por ahora.

Mientras las toneladas de troncos valen vintenes; un camión con zorra, fluctúa de 30 a 40 mil pesos.

La tonelada de PASTA DE CELULOSA vale centenares de cientos de dólares, e inclusive supera los mil dólares.

UN PAÍS, AL SERVICIO DEL “INVERSOR” EXTRANJERO.

¿QUÉ NOS DEJA? Nada. Nos roban agua. Destruyen  nuestro suelo. Y nos CONTAMINAN, inclusive nuestras aguas. NUESTRA AGUA, la que precisamos para el consumo.

Hasta esto hemos llegado. En estas POLÍTICAS, acuerdan todos; menos, la UNIDAD POPULAR.

Por eso nosotros decimos que defender la “inversión” extranjera es parte del “desvarío”, a que nos lleva una constante propaganda pertinaz, que introduce en nuestras “cabecitas”, necesidades y propuestas, como ineludibles y como que “no hay otra”. Y terminamos, creyendo y aceptando, como bueno algo que solo sirve a otros, muy pocos y que, por ahora la conformación ideológica, organizativa de nuestro pueblo no cuenta (mayoritariamente), con propuestas alternativas.


Este ejemplo, las jodas de las pasteras, solo dejaría en unos pocos camioneros, trabajo mal remunerado. Pero, siendo “grande la desgracia”, sirve.
Por eso lo dicho. Negocio de pocos. ESTANCIEROS Y” CAPITAL” EXTRANJERO.
MIENTRAS, mienten y dan cifras de URUGUAY exportando pasta de celulosa. Uruguay, exporta troncos a una zona franca (territorio extranjero), que nada paga en IMPUESTOS.


CON TODAS ESTAS “INVERSIONES”, agréguele soja transgénica, tenemos una cuarta parte menos de propietarios de la tierra. La inmensa mayoría, propietarios de menos de 200 hectáreas, que abandonaron el campo.
Tenemos, 40 mil empleos menos, en el medio rural. Estas políticas, vienen desde década del 60. Agravadas, desde la dictadura gran empresarial.

 De adentro  y de afuera.


Mientras, entre tantas cosas, creció la industria láctea, y la producción de leche. Y usted dirá y tiene razón, y todo ese crecimiento se da con 40 mil empleos menos. Menos para repartir, algunos se llevan más. ¿O no? 

Les debo entre tantas, un pequeño análisis de “la crisis lechera”.


¿Precisamos “inversión “extranjera?  NO.  ¿Qué precisamos?  En una próxima nota les decimos algo, un poco. Parte del programa de la unidad popular.


- postaporteñ@ 1818 - 2017-09-08 






LA IDEOLOGÍA DE LA CONTRARREVOLUCIÓN

 

Crítica de Andrés Nin y la ideología leninista (1)


Desde Rusia a España, desde Asia a América, el proletariado ha verificado con su propio sacrificio el papel contrarrevolucionario del leninismo, que por todos los medios liquida o aplasta la revolución social en nombre de las tareas democrático burguesas


Como dijimos, en varias notas anteriores, Nin es un teórico y representante consecuente de dicha concepción. Si hasta ahora hice mayor referencia a la práctica de dicho sujeto, ahora quiero concentrarme en la ideología misma que ese tipo de personaje defiende, porque es sin duda lo que tiene más importancia programática práctica. Lo que se aplica a todos lados contra la revolución; ¡incluso hoy en 2017!


Aquí quiero denunciar entonces a los grandes pilares del leninismo y lo haré en base al último texto que se conoció de Andrés Nin: 

  “La situación política y las tareas del proletariado” que es el texto más famoso de dicho personaje


Dicho texto es publicado por los leninistas en todas partes en cada aniversario de la desaparición y asesinato de su autor efectuado por la policía leninista rusa (este órgano del terrorismo de Estado ruso fue al mismo tiempo el cuerpo represivo más significativo de la República Española). 

Si la contrarrevolución le da tal publicidad, a ese artículo de Nin, debe ser porque es considerado una síntesis ideológica de su pensamiento o mejor dicho del leninismo aplicado concretamente en una realidad. El mismo fue republicado por Moyano en postaporteñ@ 1804 - 2017-08-05


Una vez exterminada la revolución social en Rusia, cuando todos los miembros de las organizaciones revolucionarias que no habían sido asesinados se encontraban en los campos de concentración, los jefes leninistas se dedicaron a reventarse entre ellos en una monstruosa lucha por el poder.

 De la generación de chequistas que se había trepado al movimiento social de 1917 y que desde esa fecha a 1937  se había dedicado a reprimir abiertamente, no quedó vivo ni un solo. 

Todos los aparatistas fueron liquidados. Solo se salvo uno; ¡Stalin! (y algún otro personaje secundario) 

El asesinato político de los miembros mismos del aparato se realizó no solo al interior de Rusia, sino por todas partes: se los fue a matar por doquier y se los persiguió independientemente de su nacionalidad. El caer en desgracia a los ojos de Stalin implicaba la purga y liquidación física. La persecución de los leninistas que habían dirigido el Estado, fue general e implacable, como si no se pudiera dejar ningún testigo y cómplice vivo


Nin fue uno de esos personajes que pasó de jefe a “víctima”, como también lo fue Trotsky. Pero ello no significó nunca que quienes habían sido aparatistas, chequistas y sindicalistas de Estado se hubiesen puesto algún día del lado de la revolución y de los proletarios. 

Lo de morir en la cruz por los pecados cometidos por todos es muy tradicional en el judeocristianismo; pero desde el punto de vista revolucionario, no se puede aceptar que con la desaparición física los contrarrevolucionarios “compren” sus pecados. 

En términos revolucionarios no hay Cura, Obispo ni Vaticano para arreglar viajes al cielo a cambio de dinero o sacrificio, como decía aquello de Don Dinero del Arcipreste de Hita.


Sin embargo la contrarrevolución juega con el sentimiento cultural dominante del (holocausto bíblico), con el sacrificio ritual purificador y nos presenta a esos mismos aparatistas y chequistas como ajenos a la represión y a la contrarrevolución. ¡Cómo si con el asesinato se limpiasen! 

Así, el teórico mismo del terrorismo “comunista” y el trabajo militarizado, el mismísimo que coopto a los oficiales y milicos zaristas para reprimir, y que terminó imponiendo la militarización del Ejército Rojo, luego de asesinado se compró una nueva virginidad para sus posiciones, al menos en una parte muy importante de la ideología dominante. ¡Hoy sigue siendo difícil denunciar “al pobre Trotsky” asesinado por Stalin! La historia oficial lo considera bastante redimido


Lo mismo sucede con Nin, por eso cada ola de homenaje a tan prestigioso jefe estatal ruso y de las Internacionales de Moscú, se acompaña religiosamente de lagrimones sobre su criminal asesinato y tortura…Siempre se olvida su defensa del Estado represor ruso. Para mí eso forma parte del fondo de comercio de la contrarrevolución porque también ahí se sigue privilegiando hasta en el recuerdo a “los grandes hombres de Estado” frente a las decenas de compañeros anónimos que fueron asesinados por esos mismos agentes del Estado ruso (si lo consideramos a nivel internacional hay que hablar de miles de compañeros). 

Sin embargo no debemos olvidar que detrás de esta purificación judeocristiana de los dirigentes, la contrarrevolución ideológica busca no solo vender una imagen depurada del “gran dirigente proletario” sino sobre todo imponer el programa leninista, trotskista, socialdemócrata.


Por algo Moyano publica a Nin y no a Moulin (Hans David FREUND) o a Erwin Wolf que también fueron torturados, desaparecidos en los mismos días que aquel y que dejaron importantes textos de los que todavía hoy podemos extraer lecciones. La diferencia es la total oposición entre las vidas de un Nin y un Moulin (o Wolf).  Uno fue un hombre de Estado y siempre estuvo negociando en las alturas tanto en Rusia como en España, los otros/el otro son/es un “vulgar” proletario que “solo” despotricó y dio su vida en la pelea contra todos los capitalistas y todos los Estados.

 Además lo que produjo un Wolf o un Moulin antes de morir no es recuperable por la historia oficial, sigue siendo subversivo. Por eso, publicar el texto de un contrarrevolucionario importante tiene “más valor” espectacular, es más serio y estatal, que publicar el texto de alguien que nunca formó parte del Estado burgués. ¡Por eso está lleno de publicaciones sobre Nin y hay tan poco sobre de Moulin, Wolf o tantos otros proletarios anónimos liquidados por los leninistas en España

Contra todo eso, solo me queda hacer un llamado a la lucha contra la historia oficial y estatal, de los Lenin, de los Trotsky, de los Nin y otros grandes contrarrevolucionarios y a estudiar, conocer, hacer conocer, difundir los materiales históricos de los que nunca renunciaron a la lucha contra el capital y el Estado


* * *


Entrando ahora en el texto, lo primero que hay que subrayar es que el lenguaje del mismo, es en todas partes doble, falluto, como corresponde a la contrarrevolución presentándose como su opuesto, es decir a lo que entonces los revolucionarios denunciaban como centrista (o gatopardista).

 No puede olvidarse que Nin era entonces acusado como traidor por las fuerzas proletarias que habían estado en las grandes luchas del 36/37 y que formarían las barricadas de Barcelona en mayo de 1937. 

Ahora no solo tenía que responder a la histórica acusación de haberse comportado como chequista en toda Europa, por no haber denunciado nunca la represión de los revolucionarios en Rusia y haber defendido el Estado terrorista ruso

Ahora se lo acusaba además por haber firmado el pacto del Frente Popular (que posibilitó el Frente electoral), por haber integrado el Estado posicionándose frente al proletariado armado en julio de 1936, por haber contribuido directamente al desarme del proletariado (disolución de los comités armados, de las patrullas de control, etc.), en fin por colaborar en la militarización del proletariado en el trabajo y en la guerra a través de la militarización de milicias (en notas anteriores, sobre Andrés Nin, realizo una enumeración más completa y argumentada)


La crítica del texto no la haremos siguiendo su “orden” o argumentación, para no someternos a su metodología que es antagónica con la nuestra. 

Tampoco nos detendremos en la fraseología “socialista” (o más bien demócrata socialista) que hoy suena tan radical y hasta de base pero que entonces era el fondo de comercio de casi todos los partidos y fuerzas políticas estatistas. Solo basta con recordar que se decían socialistas y sindicalistas: 

los socialdemócratas del PSOE y de la UGT,  parte importante de los Catalanistas y otros nacionalistas, los Falangistas, los del PC español así como también los oficiales leninistas rusos y españoles. Por lo tanto la fraseología vaga de Nin al respecto, solo es una muestra más de su sumisión al Estado, además del coqueteo que siempre Nin había conservado con respecto al socialismo oficial y burgués de la UGT y el PSOE y particularmente con respecto a su jefe histórico y personaje más representativo: 

Largo Caballero
Este personaje había sido el más alabado (incluso y muy especialmente por los agentes de Moscú) por su capacidad a presentarse como radical, para asegurar mejor el desarme del proletariado. Nadie más divinizado y adulado como el “socialista por excelencia”, como el que transformaría la “revolución democrática en revolución socialista” y que sus partidarios habían bautizado como el LENIN ESPAÑOL.

 ¡Tantas veces Largo Caballero y Andrés Nin habían estado del mismo lado defendiendo al Estado, al leninismo y formando el Frente Popular!, que cuando se impusieron como representantes del “socialismo” en el Gobierno de Cataluña en julio de 1936 a nadie le llamó la atención. 

Ni siquiera sería pertinente decir que fueron recibidos con los brazos abiertos, al contrario fueron ellos los que como Estado recibieron a los otros y mediaron entre el catalanismo de Companys, el PCE y los “anarquistas” que ya estaban dispuestos a abandonar el “ir por el todo” y por ello a trepar al Estado
Todo “Lenin” necesitaba un “Trotsky” y Nin sabía que las pequeñas diferencias entre ambos, a pesar de los insultos (¡Trotsky también había insultado a Lenin como Maximiliano –Robespierre- o gran dictador!), entre él y Largo Caballero, no serían decisivas y que lo fundamental los unificaban.

 Por eso insistía siempre con placer en llamarlo “Lenin” entendiendo por eso que ese socialismo se haría un día revolucionario. Sin duda él mismo se veía confirmado y adulado a su vez como el “Trotsky de la revolución española”.  ¡El papel le encantaba! A pesar de lo que Trotsky decía contra Nin (ni más ni menos que lo acusaba de haber traicionado la revolución en el frentepopulismo), éste siempre se había considerado un poquito “un Trotsky”.  

¡Hasta cuando fue secretario de Bujarin, quería seguir trepando para ser secretario de Trotsky!


* * *


El análisis del texto mismo lo haremos entonces en base a 3 pilares esenciales de la contrarrevolución Estatal que Nin defiende:


1)    la revolución democrática burguesa y la “revolución democrática socialista”,


2)    El sindicalismo, la unidad sindical “socialista”/”comunista” y la “Alianza Obrera”


3)    el frente populismo y el antifascismo


Estos son 3 pilares invariantes de la socialdemocracia y el leninismo.Dichos pilares fueron decisivos tanto en la dirección del Estado represor ruso (contra las consignas finalistas en la época de Lenin a nivel nacional e internacional: “lucha contra el capitalismo”, “revolución social directa contra el Estado”,” tercera revolución”…), como en la Internacional “comunista” hasta su liquidación final. Por supuesto fueron aplicados a la letra en España hasta la transformación total de la revolución social en guerra imperialista.


Es la esencia misma del programa burgués para liquidar la lucha autónoma del proletariado y someterlo a la guerra interburguesa. Veremos lo que en España esas consignas tuvieron de particular.


 RICARDO - postaporteñ@ 1818 - 2017-09-08 





POSTALINAS

Caso Jorge Julio López en la CIDH:

Corren traslado al Estado Argentino



El 7 de mayo del año 2014,  el colectivo de organismos de DDHH Justicia Ya! La Plata realizamos una denuncia ante la Comisión Interamericana de Derechos Humanos de la OEA,  por el secuestro y la segunda desaparición forzada del compañero Jorge Julio López, ocurrida el 18 de septiembre de 2006. La denuncia solicitó que se investigue la responsabilidad y aquiescencia del Estado argentino en el caso.


Jorge Julio López fue desaparecido por segunda vez hace casi 11 años, en las vísperas de los alegatos del primer juicio oral que condenó al genocida Miguel Etchecolatz, director de investigaciones de la policía bonaerense durante la dictadura. López fue un testigo fundamental para probar los crímenes cometidos por Etchecolatz y otros integrantes de la bonaerense.


Desde entonces, la movilización de los organismos que integramos Justicia Ya!, el  Espacio Memoria Verdad y Justicia y la Multisectorial La Plata, Berisso y Ensenada  por su aparición con vida ha sido incesante. La causa judicial que estuvo cargo del juez Blanco, en cambio, acumula millares de fojas y expedientes paralelos con cientos de declaraciones, sin ningún resultado. 

El juez ordenó decenas de rastrillajes tras pistas falsas. Puro distraccionismo para no investigar a la bonaerense, donde revisten los discípulos de Etchecolatz. Por su parte, el gobierno de Néstor Kirchner y luego el de Cristina Fernández,  cubrió con un manto de silencio el caso, siendo  responsables por el mantenimiento de las cadenas de impunidad, por la permanencia en funciones de más de 9.000 funcionarios policiales que prestaron servicios durante la última dictadura militar y de toda una estructura represiva forjada por aquella.


En el día de la fecha, fuimos notificados por parte de la CIDH, que se remitió nuestra denuncia al Estado Argentino, por el plazo de 90 días para que responda la misma.


El estado Argentino deberá responder sobre la segunda desaparición de Jorge Julio López, en el mismo momento en que debe responder sobre otra desaparición forzada: la de Santiago Maldonado, detenido desaparecido desde el 1 de agosto de este año, luego de la represión sufrida por parte de la gendarmería a una comunidad mapuche.


Aparición con vida de Jorge Julio López y de Santiago Maldonado basta de impunidad!!!

Contacto: Nilda Eloy - AEDD (2215865035)


JUSTICIAYA!  LA PLATA -6/09/2017



Viva la diferensia*

Santiago Maldonado fue desaparecido por el Estado argentino en plena democracia. 

Santiago Maldonado fue desaparecido por el Estado mientras hacía un corte de ruta como parte de la lucha mapuche contra los Estados argentinos y chilenos que le imponen mediante el Terrorismo constante la prevalecencia de la propiedad privada por encima de la vida


Santiago Maldonado fue desaparecido por la policía mientras se defendía con piedras junto a un reducido grupo de mapuches encapuchados, con rostros cubiertos. Santiago Maldonado fue desaparecido por saber que las personas valen más que los papeles de propiedad, por saber que la policía está para defender los privilegios, por saber que los Estados son todos terroristas.


Quizá algunas cosas busquen ser malinterpretadas por los medios masivos, pero en nuestros propios medios (Semanario Alternativas) no podemos entreverar las cosas.
La marcha por Santiago Maldonado en Montevideo no acabó en disturbios.  

Hubo una marcha, en ella hubo canticos como "contra la represión: solidaridad y acción", pancartas, hubo charlas, hubo reencuentros, hubo piedras, hubo un efectivo de la seguridad privada que apuntó con un arma a los manifestantes para evitar que grafitearan los vidrios de la empresa que lo explota... por suerte algunas personas le hicieron frente y lograron que no disparara y que volviera a meterse para adentro del local.


La desaparición de Santiago nos afecta a cada uno/a de maneras diferentes. Seguro que a quienes les llega más de cerca sienten más rabia y lo expresaron de la manera que sintieron más pertinente: atacando simbólicamente a todo aquello que desapareció al compañero anarquista Santiago "el lechuga" Maldonado, y seamos sinceros, fueron acciones pacíficas, pues el ataque no fue hacia personas sino a objetos inanimados.


Parece mucho asustarse y hasta juzgar de inapropiado o exagerado que ante la desaparición de un compañero haya quienes hagan grafitis, echen un poco de pintura roja sobre la fachada de entidades estatales cómplices o directamente ejecutoras de la desaparición de Santiago o tiren piedras a vidrios de empresas (como ABITAB, la cual, análogamente a Benetton, es responsable de desalojar a cientos de personas de sus casas)


Estos ataques pacíficos son sólo una manera más de evidenciar la violencia del sistema que nos expulsa de nuestras casas, que envenena las aguas, que envenena nuestros cuerpos, que nos amenaza o nos lleva a la cárcel, que nos llena de bocas los barrios, que nos desaparece a nuestros compañeros (Santiago no es el primero), etc.


Con todo esto nadie quiere decir que una manera de manifestarse es mejor que otra. Simplemente queremos responder a aquellas personas que quieren imponer una forma única de manifestación válida y decirles que habemos quienes aceptamos y creemos muy hermosa y saludable la existencia de diferentes formas de expresión.


Diferensia (différance) es un neologismo o, mejor, un neografismo de carácter filosófico, homófono de la palabra francesa différence (diferencia) propuesto por Jacques Derrida y que refiere al hecho de que algo no se pueda simbolizar porque desborda la representación.


BF GC

ANTICAPITALISMO  REACCIONARIO

Rolando Astarita [Blog]


Cada vez más encuentro que hay marxistas que piensan que todo movimiento anticapitalista es progresista, y debe ser apoyado. Pienso que es un error. Es que un movimiento, o partido, puede ser anticapitalista, pero no por ello favorable a la clase obrera. Más concretamente, hoy existen movimientos que rechazan al capitalismo, pero para volver a regímenes precapitalistas. Precisemos que en  muchos casos ni siquiera buscan volver al sistema de propiedad pequeño burguesa (como pretendió siempre el socialismo pequeño burgués, criticado en El Manifiesto Comunista), sino a regímenes más primitivos. 

Esto explica que sean particularistas, exalten lo ancestral y endiosen sus fuentes étnicas (reales o inventadas). Lo principal, desde un enfoque marxista, es que no se identifican con la clase obrera moderna, ni buscan que esta tome el poder. Por eso también rechazan el internacionalismo.


Dada la exaltación nacionalista que por estos tiempos campea en muchos grupos de izquierda, conviene recordar la crítica de Marx a David Urquhart y su “clique de hombres sabios”. Urquhart y su gente se oponían tanto a los partidos oficiales y semi-oficiales como a los Cartistas, y buscaban romper con toda forma de sistema representativo. Eran lo que hoy podíamos llamar “radicales anticapitalistas extremos”. Pero su perspectiva era retrógrada

 En palabras de Marx, Urquhart buscaba desenterrar “las verdaderas viejas fuentes legales de los tiempos anglo-sajones” y “reducir la moderna división del trabajo y la concentración del capital al viejo nivel anglo-sajón o, preferentemente, al de Oriente”. Era “un profeta que mira hacia atrás y está encantado con la vieja Inglaterra” (véase “The Association for Administrative Reform. – People’s Charter”, 5 de junio de 1855 (http://marxengels.public-archive.net/en/ME0904en.html#N179). Mutatis mutandi, consideraciones parecidas se aplican hoy a movimientos que son elevados a la categoría de “revolucionarios” por no pocos socialistas.


Naturalmente, los marxistas nos oponemos a la represión y la discriminación –muchas veces impregnada de racismo- de estos movimientos por parte del régimen burgués. 

Pero esto no debería llevar a ocultar el carácter reaccionario de sus propuestas y programa.


Resolución de solidaridad 

con el derecho de

autodeterminación del

 pueblo catalán


1. Desde hace seis años el pueblo catalán se manifiesta de forma masiva por la independencia del Estado español. El Parlamento de Catalunya aprobó llamar a un referéndum de autodeterminación. El Gobierno catalán fijó ese referéndum para el próximo 1 de octubre.

2. El Gobierno y los tribunales del Estado español han advertido que no tolerarán el referéndum y han anunciado un arsenal de medidas represivas para impedirlo: juicios, intervención de las instituciones de Catalunya y de las fuerzas represivas del estado.. Junto al Gobierno del Partido Popular se han alineado Ciudadanos y el PSOE.


3. Defendemos el referéndum del 1 de octubre. Llamamos a votar por la independencia del pueblo catalán, no sólo porque se ha expresado masivamente en este sentido, sino también porque la necesaria relación entre pueblos y naciones que hoy forman el estado español debe hacerse sin imposiciones y esto no es posible bajo la Monarquía centralista.

 La unidad de trabajadores/as debe realizarse en defensa de este derecho democrático. Una República en Catalunya abriría un camino para otros pueblos y naciones para acabar con este anacrónico régimen impuesto al final del franquismo. Luchamos para que esa república sea de y para los y las trabajadoras, en el camino de una Federación de Repúblicas Socialistas.


Llamamos a la solidaridad internacional de los trabajadores y las trabajadores y de sus organizaciones contra la represión del Estado español en defensa del derecho de autodeterminación:  
 Referéndum el 1 de octubre


VI Congreso de la Unidad Internacional de los Trabajadores – Cuarta Internacional (UIT-CI)


Vamos bien


La empresa Gas Sayago, que constituyó el Estado para instalar la regasificadora, perdió en el primer semestre de este año U$S 5.3 millones. Todo es una fantasmada y un gran agujero negro.

Cuando sepamos realmente lo que el Estado invirtió en el fantasmal proyecto de la regasificadora, los uruguayos quedaremos casi tan espantados como con Ancap. Hasta ahora van – irían, porque para peor las cifras no se conocen bien – tirados al agujero negro unos cien millones de dólares, a cuenta, desde ya, de “Papá” Estado, dado que Gas Sayago es una empresa de UTE y de Ancap.

En el primer semestre de 2017 las pérdidas de la empresa fueron – apenas – de U$S 5.3 millones de dólares. Más de cinco millones en seis meses….

Como única explicación de este fenomenal desfasaje la ministro de Industria y Energía, ingeniera Carolina Cosse, dijo en un reportaje a Búsqueda – en el que, de paso, dio a entender que procura ser candidata a la presidencia de la República – que “han cambiado las circunstancias”, por lo que el proyecto de la regasificadora ya no interesa, dado el cambio en la matriz energética, aspecto que el gobierno viene proclamando desde hace varios años. 

Quiere decir que estamos ante una nueva y costosa improvisación…

Correo de los Viernes 686


- postaporteñ@ 1818 - 2017-09-08 





EVO Y SU TERCA CARRETERA


¿Por qué una vía asfaltada que va a atravesar un área protegida despierta tantas pasiones en Bolivia? El TIPNIS es la palabra mágica para la oposición al gobierno de Evo Morales, pero ahora también para quienes lo defienden. ¿Qué es lo que realmente está en juego?


Por Rafael Archondo Nueva Sociedad - Agosto 2017


En junio de 2013, el vicepresidente de Bolivia ofreció una conferencia en la ciudad de Buenos Aires. El público congregado allí acudía al cierre magistral de un ciclo rotulado como de «la Patria Grande».


Frente a sus interlocutores argentinos, Álvaro García Linera tuvo la necesaria confianza para admitir una de las pocas derrotas sufridas por el gobierno boliviano, donde él actúa como el segundo hombre desde 2006. Se refirió a ella con honestidad frontal, algo que quizás no le hubiese convenido hacer en su país (la noticia se conoció en Bolivia siete meses más tarde gracias a una grabación y no tuvo eco en los círculos oficiales).


A la distancia, la autocrítica fluyó sin contratiempos. García Linera reconoció que la decisión de suspender la construcción de una carretera que debía atravesar el llamado Territorio Indígena Parque Isiboro Sécure, más conocido como TIPNIS, fue un paso hacia atrás. «Nos fue mal, hemos retrocedido», reconoció.
Admitió que el principal error oficial fue no haber sabido explicar oportunamente la necesidad de la carretera a las comunidades que habitan en la zona. «Debíamos haber hecho la consulta antes de tomar la decisión», sentenció. Consultar para persuadir, podría añadirse.


En efecto, cuesta creer que una necesidad tan obvia, dentro un espacio desarticulado del resto del territorio, no haya brotado espontáneamente del seno de los pueblos mojeño trinitario, chimán y yuracaré, que circulan desde hace siglos por la selva protegida. 

Al mismo tiempo, no resulta tan extraño su desapego por el asfalto si se piensa que se movilizan a través de los ríos y que su principal actividad no es la agricultura comercial, sino la pesca y la recolección para el autoconsumo. Una carretera que los conecte con los mercados podría ser más bien algo suntuoso o solo un imán seductor para quienes no viven en el parque y necesitan transitar entre las ciudades que quedarán interconectadas a través de él. La carretera es quizás más atractiva para camioneros, comerciantes y traficantes de madera o lucrativos despojos de animales exóticos.


«Pese a haber tenido esa victoria electoral en el TIPNIS [en los comicios regionales de 2013], pese a haber hecho esa consulta, sabemos que sigue siendo un tema muy sensible y que hay que conversar más con los grupos de ambientalistas, con los grupos que defienden la naturaleza, con sectores de los pueblos indígenas todavía opositores, con sectores de clase media urbana, que se sintieron interpelados por el tema medioambiental; sabemos que aunque aquí [en el TIPNIS] nos aprueben la carretera, no es suficiente porque ya se ha vuelto un tema de carácter nacional, entonces hay que asumir el debate con todo el país y eso tardará, seguramente, años», advirtió García Linera en su conferencia porteña.


Así el vicepresidente ponía en claro que el conflicto había dejado de ser local para transformarse en un tema de mayor irradiación. Ni siquiera era suficiente que las comunidades indígenas aceptaran las obras camineras, el asunto se había hecho parte del debate nacional y correspondía al conjunto de los ciudadanos consentir el proyecto.

 Ello postergaba indefinidamente la obtención del consenso. La derrota gubernamental era entonces irrefutable.


Puede subrayarse entonces que, de acuerdo con el balance vicepresidencial de hace cuatro años, lo que estuvo mal planteado fue el método elegido, pero no la meta final. El gobierno boliviano consideraba que la carretera era necesaria, idea que jamás salió de su cabeza en todo este tiempo, y que correspondía volver a fojas cero para reemprender un proceso lleno de autocorrecciones.

 Es la paciencia de la que debe armarse cualquier democracia en la que, más que vencer, se necesita convencer.


Comprendiendo la magnitud del retroceso, García Linera dijo en esa ocasión que la carretera será realidad algún día. «Hay que construir de aquí a 100 años, 50 o 20», afirmó con cierta resignación.


Pero parece que el tiempo calculado en ese entonces se ha acortado considerablemente. En julio de este año, el gobierno ha vuelto a la ofensiva respaldando la aprobación de la ley 266, en la que se revierte la siguiente prohibición lograda por los defensores del TIPNIS en octubre de 2011:

«Se dispone que la carretera Villa Tunari-San Ignacio de Moxos, como cualquier otra, no atravesará el TIPNIS» (artículo 3 de la ley 180)
Ahora, tras haber ganado su última elección presidencial en 2014, en la que incorporó la carretera dentro de sus ofertas electorales, el gobierno de Evo Morales cree haber forjado el músculo suficiente como para retomar el controversial proyecto carretero. 

No sabemos si los ambientalistas, las clases medias urbanas y los propios indígenas ya se convencieron de su conveniencia. El hecho es que hacia allí caminan las inversiones públicas, junto a las elites económicas y políticas de las dos regiones que quedarán conectadas por la vía: 

el Beni y Cochabamba. Parece ser el momento político ideal, dado que el MAS tiene en su poder esas dos gobernaciones, el control de los medios de comunicación y el tiempo necesario para hacer irreversible la obra, dado que aún restan dos años para finalizar el tercer mandato de Evo Morales en el poder


Pero ¿por qué es tan crucial para todos los actores políticos bolivianos lo que pueda suceder en el TIPNIS? Las respuestas a esa pregunta son diversas. Sin embargo, la principal de ellas tiene relación con el carácter indígena del gobierno

Una de las principales banderas del Movimiento al Socialismo (MAS), la confederación de sindicatos que llevó a Morales al gobierno hace poco más de una década, ha sido la Declaración Universal de los Pueblos Indígenas, aprobada en la Organización de las Naciones Unidas (ONU) en septiembre de 2007. Bolivia fue el primer país en incorporar ese documento a su legislación, a solo un año de la llegada del MAS al centro de las decisiones.


En su artículo 32, la Declaración afirma: «Los Estados celebrarán consultas y cooperarán de buena fe con los pueblos indígenas interesados por conducto de sus propias instituciones representativas a fin de obtener su consentimiento libre e informado antes de aprobar cualquier proyecto que afecte a sus tierras o territorios y otros recursos, particularmente en relación con el desarrollo, la utilización o la explotación de recursos minerales, hídricos o de otro tipo»
¿Hubo consentimiento libre e informado antes de la aprobación de la ley 266? 

Es decir, ¿los pueblos mojeño trinitario, chimán y yuracaré aceptaron que la prohibición para construir una carretera fuera levantada seis años más tarde? Del mismo modo, ¿fueron consultados esos pueblos para establecer esa prohibición en 2011? Es un tema a debatir


Una vez que asumió la derrota de 2011, el gobierno fue avanzando gradualmente hacia la reversión plena de lo concedido. Lo primero que hizo fue aprobar la ley 222, en la que reglamenta una consulta a las comunidades del TIPNIS. Allí se aspiraba, no a averiguar, sino a «lograr un acuerdo» entre el Estado y los pueblos para «definir si el TIPNIS debe ser zona intangible o no, para viabilizar el desarrollo de las actividades de los pueblos (…), así como la construcción de la carretera Villa Tunari-San Ignacio de Moxos». En ningún caso se menciona a las instituciones representativas de los consultados, como recomienda la Declaración de Naciones Unidas, sino solo a las «comunidades» en general, y además se asignan la preparación y puesta en práctica del proceso de acopio de opiniones a los ministerios de Medio Ambiente y Obras Públicas
Está claro que la ley 222 no cumple con los estándares mínimos de la ONU.

 En estos se plantea insistentemente que la entrega de la información que hace posible el consentimiento no puede provenir solo del que desarrolla el proyecto, como sucedió por dictamen claro de la propia ley en cuestión. 

Esa consulta fue previa, pero difícilmente libre y mucho menos informada. 

Evaluaciones emitidas en ese momento por el defensor del Pueblo hablan de coerción indirecta, debido a que el personal encargado de consultar –funcionarios dependientes de los ministerios citados– entregaron regalos a los consultados con el velado objetivo de influir sobre su ánimo.


El hecho es que esa consulta ha sido usada ahora como principal sustento para redactar y aprobar la ley 266. Hoy se dice que han sido los mismos pueblos los que han pedido levantar la prohibición establecida en 2011.


En efecto, queda claro que el desenlace del conflicto del TIPNIS puso y pone en juego el carácter indígena del gobierno.

Evo Morales necesita con urgencia la confirmación de que la carretera convalida su adhesión a la Declaración Universal de 2007. Por eso ha esperado seis años para volver a poner en pie el cuestionado proyecto. Regresa tras haber cumplido las formalidades que le permiten seguir usando el discurso de lo étnico como matriz de sus decisiones mayores.

 En tal sentido, el balance vicepresidencial con el que comenzamos este artículo reencuentra su sentido en las leyes 222 y 266. Son la ruta del reencuentro, al menos retórico, de las variables que sostienen a Evo Morales en el mando.

 Así, puede decirse que, a pesar de todo lo que se ha dicho, el gobierno de Bolivia aspira a seguir resolviendo sus dilemas de legitimidad sin salir del universo de lo indígena.


Sin embargo, aunque la identidad central del Estado «plurinacional» se preserva formalmente, está claro que estos 11 años de ejercicio del poder han llevado a una clara ruptura con el pasado reciente. El MAS aún reivindica lo indígena, pero lo ha despojado de los matices aportados por los pueblos amazónicos de tierras bajas.

 Hoy, lo indígena gubernamental es únicamente la encarnación de lo aymara y lo quechua. Hoy, lo indígena oficial representa los ideales de progreso de un segmento andino, aunque mayoritario ya solo parcial, de la población originaria. El MAS y Evo Morales persiguen un ideal agrícola, intensivo en el uso de recursos, apegado al monocultivo, al mercado e incluso a la exportación.


El TIPNIS es continuidad, pero también un quiebre doloroso con los habitantes originarios de la Amazonía, quienes parecen ser las víctimas primordiales de esta articulación entre el occidente y el oriente del país, nexo que se consolida precisamente con la terca carretera que partirá en dos la espesura verde.


NUSO - postaporteñ@ 1818 - 2017-09-08 




Cómo explica la historia 

la crisis coreana (2)


William R. Polk


[Esta extensa nota, la primera de dos de este especialista ex-asesor de Kennedy, puede ayudar, si al final terminamos en el horno, a entender por qué pasó. Un análisis, pero también puede ser leída como una autocrítica]

La Guerra Fría in vitro



Aunque no era tan evidente en los anuncios públicos, los estadounidenses ya estaban motivados por el temor hacia los rusos, o hacia sus posibles simpatizantes comunistas locales. Aquí de nuevo Corea recuerda a Indochina, Filipinas e Indonesia. Los aliados del tiempo de guerra se convirtieron en enemigos en tiempo de paz. Al menos in vitro, la Guerra Fría ya había comenzado.


En el momento justo, virtualmente como un deux ex machina, Syngman Rhee apareció en escena. Confiable y vocacionalmente anticomunista, orientado hacia Estados Unidos, y -aunque fuera de todo contacto con los asuntos de Corea- étnicamente coreano, era justo lo que las autoridades estadounidenses querían. Reunió a los grupos derechistas en un gobierno virtual que debía convertirse en un gobierno real bajo la égida de los Estados Unidos.


Mientras tanto, las autoridades soviéticas no se enfrentaban a similares problemas políticos ni administrativos. Tenían disponible el prototipo de un gobierno coreano.

 Este gobierno-listo-para-usar ya tenía una historia: miles de coreanos habían huido a Manchuria para escapar del gobierno japonés y, cuando Japón los llevó la guerra formando el estado títere que llamaron Manchukuo en 1932, algunos de los refugiados se unieron para lanzar una guerra de guerrillas. El Partido Comunista inspiró y asumió el liderazgo de esta insurgencia. Entonces, como hicieron todos los insurgentes -desde Tito y Ho Chi-Minh hasta Sukarno- se proclamaron como gobierno en el exilio.


El grupo coreano estaba pronto, cuando la invasión soviética lo hizo posible, para convertirse en el núcleo de la República Popular Democrática de Corea (RPDC). La URSS lo reconoció como el único gobierno de Corea en septiembre de 1948. Y, a pesar de su crudo y frecuentemente brutal método de gobierno, adquirió una patina de legitimidad por sus años de lucha armada contra los japoneses.


Tanto EE.UU. como la URSS vieron en Corea su puesto de avanzada. Primero trataron de llegar a un acuerdo para repartirse la autoridad entre ellos. Pero admitieron el fracaso el 2 de diciembre de 1945. 

Los rusos parecían esperar el fracaso y apenas reaccionaron, pero los estadounidenses buscaron la ayuda de las Naciones Unidas para dar forma a su posición en Corea. A petición suya, la ONU formó la "Comisión Provisional sobre Corea". Se suponía que debía operar en toda Corea, pero los rusos la consideraban una operación estadounidense y la excluyeron del Norte. Después de una laboriosa campaña, se logró realizar elecciones, pero sólo en el sur, en mayo de 1948.


Las elecciones dieron lugar a la formación el 15 de agosto de un gobierno liderado por Syngman Rhee. En respuesta, un mes más tarde, el 9 de septiembre, el ex líder guerrillero, comunista y aliado soviético Kim Il-sung, proclamó el estado de Corea del Norte. Así, el arreglo ad hoc para evitar la colisión de dos ejércitos ¡se transformó en dos estados!


La URSS tenía una larga historia con Kim Il-sung y la dirección del Norte. Había apoyado discretamente al movimiento guerrillero en Manchukuo (el alias de Manchuria) y presumiblemente había seleccionado a los dirigentes comunistas a través de las purgas de los años treinta y los observaron de cerca durante la guerra. Los supervivientes eran, según criterios soviéticos, hombres confiables. Es por eso que les era posible a los rusos mantener un perfil bajo en los asuntos de Corea del Norte.

 A diferencia de los estadounidenses, se sintieron capaces de retirar su ejército en 1946. Mientras tanto, por supuesto, su atención se centró en la marea mucho más masiva de la revolución en China. Corea debía de parecer una especie de escenario lateral.



La posición de los Estados Unidos era diferente en casi todos los aspectos. En primer lugar, no existía en el Sur un dibujo de larga data, pro-americano o ideológicamente democrático.

El ascenso de Rhee



La figura principal, como ya se ha mencionado, fue Syngman Rhee. Mientras que Kim Il-sung era un comunista dedicado, Rhee ciertamente no era un devoto de la democracia. Pero aparte de la ideología, Rhee estaba profundamente influenciado por los contactos con los estadounidenses. 

 Los misioneros le salvaron la vista (después de padecer viruela), le dieron una educación básica de estilo occidental, lo emplearon y lo convirtieron al cristianismo.


Probablemente también influenciado por ellos, siendo joven se había involucrado en las protestas contra el atraso coreano, la corrupción y el fracaso para resistir el colonialismo japonés. Sus actividades lo llevaron a la cárcel cuando tenía 22 años de edad. Después de cuatro años de lo que parece haber sido un régimen severo, fue puesto en libertad y en 1904 hizo su camino hacia el exilio en Estados Unidos.

Algo excepcional en un joven de ninguna distinción particular - aunque estaba orgulloso de una relación distante con la familia real coreana - al menos fue recibido si no fue escuchado por el presidente Theodore Roosevelt.
 A lo largo de los años se realizaron reuniones ceremoniales o pre-guionadas con otros líderes norteamericanos. Los dirigentes estadounidenses con los que se reunió no consideraron a Corea de mucha importancia y, aunque lo hubieran considerado, Rhee no tenía nada que ofrecerles.

 Así que parece ser que sus 40 años de vagabundeo de una universidad a otra (BA en la Universidad George Washington, MA en Harvard y PhD en Princeton) y el trabajo en la YMCA y otras organizaciones fueron una letanía de frustraciones.
Fue la entrada de Estados Unidos en la guerra la que dio a Rhee en 1941 la oportunidad él había buscado por mucho tiempo: convenció al presidente Franklin Roosevelt de abogar por lo menos nominalmente la causa de la independencia coreana.

 Las amables palabras de Roosevelt probablemente tendrían poco efecto, como aparentemente Rhee se dio cuenta. Para darles sustancia, trabajó estrechamente con el OSS (el antepasado de la CIA) y desarrolló contactos con los jefes militares estadounidenses. Dos meses después de la rendición japonesa en 1945, fue trasladado a Corea por orden del general Douglas MacArthur.


Al establecerse en Seúl, dirigió a grupos de derechistas coreanos para oponerse a todos los intentos de cooperación con la Unión Soviética y se centró especialmente en oponerse a la creación de un estado de Corea del Norte.

 Para aquellos más familiarizados con la historia europea, se podría considerar que aspiraron al papel desempeñado en Alemania por Konrad Adenauer. Para desempeñar un papel similar, Rhee se hizo "el hombre de los Estados Unidos". Pero no podía hacer lo que Adenauer sí pudo hacer en Alemania, ni tampoco podía proporcionar a Estados Unidos: una sociedad ideológicamente controlada y los ingredientes de un Estado unificado como Kim Il-sung fue capaz de dar a la Unión Soviética.


Pero, respaldada por el gobierno militar estadounidense y usando externamente formas democráticas, Rhee fue electo por un sospechoso resultado del 92,3 por ciento de los votos, para ser presidente de la recién proclamada República de Corea.


La debilidad de Rhee con respecto a Kim tuvo dos efectos: Que aunque las fuerzas soviéticas pudieran ser retiradas del Norte en 1946, Estados Unidos se sintió incapaz de retirar sus fuerzas del Sur. Han permanecido allí desde entonces. Y el segundo efecto fue que mientras Rhee trataba de imponer a su sociedad un régimen autoritario, similar al impuesto en el Norte, no podía hacerlo con eficacia y a un costo aceptable.


La administración que él heredó en parte dependía en gran medida de los hombres que habían servido a los japoneses como soldados y policías. Se estaba embadurnando con su propia brocha. Dejó a un lado la llamada positiva del nacionalismo por la advertencia negativa del anticomunismo. 

En lugar de liderazgo, se basó en la represión. De hecho, se puso al frente de una represión brutal, que se asemejaba a la de Corea del Norte, pero que, a diferencia de la tiranía norcoreana, estaba completamente expuesta.

 El resentimiento en Corea del Sur contra Rhee y su régimen pronto creció hasta el nivel de una insurgencia virtual. Rhee pudo haber sido el querido de Estados Unidos, pero no era amado en Corea. Esa era la situación cuando comenzó la Guerra de Corea.

Reanudando la guerra

La Guerra de Corea se inició técnicamente el 25 de junio de 1950, pero por supuesto el proceso comenzó antes de que se dispararan los primeros tiros. Tanto Syngman Rhee como Kim Il-sung estaban decididos a reunificar Corea, cada uno bajo sus propios términos. Rhee había hablado públicamente de la "necesidad" de invadir el Norte para reunificar la península. 

El gobierno comunista no necesitaba hacer declaraciones públicas, pero los acontecimientos sobre el terreno debieron convencer a Kim Il-sung de que la guerra ya había comenzado.

 A lo largo de la línea divisoria, según John Merrill, profesor norteamericano en cuestiones de Corea, un gran número de coreanos ya habían sido heridos o muertos antes de que "comenzara" la guerra.
El evento que parece haber precipitado la guerra a gran escala fue la declaración del gobierno de Syngman Rhee de la independencia del Sur.

 Si se le permitiese mantener esa acción, como Kim Il-sung lo entendió claramente, habría impedido la unificación. Lo consideraba un acto de guerra, y estaba listo. Había usado sus años en el poder para construir uno de los ejércitos más grandes del mundo, mientras que el ejército del Sur había sido sangrado por sus propios gobernantes.


Kim Il-sung debe haber conocido en detalle la corrupción, la desorganización y la debilidad de la administración de Rhee. Como informó el periodista y comentarista inglés sobre Corea Max Hastings, el séquito de Rhee estaba involucrado en un robo masivo de recursos e ingresos públicos. El dinero destinado por los donantes extranjeros para construir un Estado moderno fue desviado a cuentas bancarias extranjeras. 

"Soldados fantasmas", el equivalente militar de las Almas Muertas de Gogol, que sólo existían en los registros del ejército, recibían salarios que los altos oficiales embolsaban mientras que los relativamente pocos soldados de verdad se quedaban sin cobrar, e incluso desnudos, desarmados y sin alimentos. En pocas palabras, Rhee le presentó a Kim una oferta que no podía rehusar.

Ahora lo sabemos, pero entonces no, que Stalin no estaba a favor del ataque del Norte y lo aceptó sólo si China, entonces ya un estado liderado por los comunistas, asumía la responsabilidad. 

Lo que realmente significaba "responsabilidad" no estaba claro, pero resultó suficiente para poner en acción a Kim Il-sung. Ordenó a su ejército que invadiera el Sur. Cruzando rápidamente la línea de frontera, sus soldados avanzaron hacia el sur. Mucho mejor disciplinados y motivados, tomaron Seúl en apenas tres días, el 28 de junio.


Syngman Rhee proclamó la lucha hasta la muerte, pero, de hecho, él y su círculo íntimo ya habían huido. Fueron rápidamente seguidos por miles de soldados del ejército sureño. Muchos de los que no huyeron, desertaron al Norte.


Organizada por Estados Unidos, el Consejo de Seguridad de Naciones Unidas, aprovechando la ausencia de la delegación soviética, votó el 27 de junio, justo antes de la caída de Seúl (1), la creación de una fuerza para proteger al Sur. Unos 21 países encabezados por Estados Unidos proporcionaron a unos tres millones de soldados para defender el Sur (2). 

Eran países como Tailandia, Vietnam del Sur y Turquía con sus propios problemas de insurgencia, pero la mayoría de los combates fueron hechos por las fuerzas estadounidenses. Habían sido empujados hacia el sur y casi echados de la península coreana por el ejército de Kim Il-sung. Las tropas estadounidenses estaban mal equipadas y casi siempre superadas en número. La lucha era amarga y las bajas eran altas.

 A finales de agosto, sólo tenían una décima parte de lo que había sido la República de Corea, sólo la provincia meridional alrededor de la ciudad de Pusan.

Los chinos se preparan

Analizando sabiamente el desequilibrio real de las fuerzas sureñas respaldadas por Estados Unidos y las fuerzas aparentemente victoriosas comandadas por Kim Il-sung, el estadista chino Zhou Enlai (3) ordenó a su personal militar estudiar qué se podría esperar que hiciesen los estadounidenses: negociar, retirarse, o intentar romper el cerco en Pusan. El personal reportó que los estadounidenses ciertamente movilizarían su poder potencial superior para contraatacar.


Para protegerse de la intromisión en China, Zhou convenció a sus colegas de trasladar fuerzas militares hasta la frontera chino-coreana y también convenció al gobierno soviético de darle apoyo aéreo a los norcoreanos. Lo notable fue que el personal de Zhou predijo exactamente lo que harían los estadounidenses y dónde lo harían. Dirigidos por el general Douglas MacArthur, los estadounidenses hicieron un hábil y audaz contraataque. Aterrizando en Inchon el 15 de septiembre, cortaron la mayor parte del ejército del norte de sus bases. La operación fue un brillante éxito militar.


Pero, como muchas acciones militares brillantes, desarrolló su vida propia. MacArthur, respaldado por el Secretario de Estado estadounidense Dean Acheson y el General George Marshall decidió- por orden del Presidente Truman - trasladarse hacia el norte para implementar el programa de Syngman Rhee para unificar a Corea. 

A partir del 25 de septiembre, las fuerzas estadounidenses recobraron Seúl, virtualmente destruyeron al ejército norcoreano rodeado y el 1 de octubre cruzaron el paralelo 38º. Ante lo poco que había para ser detenidos, avanzaron hacia el río Yalu en la frontera china. Ese movimiento asustó a los gobiernos soviético y chino que temían que la ola de la victoria llevaría a los estadounidenses a sus territorios.

 Stalin se contuvo negándose a comprometer a las fuerzas soviéticas, pero recordó a los chinos su "responsabilidad" por Corea.
En respuesta, los chinos golpearon con una estratagema nueva. Enviaron una enorme fuerza armada, unos 300.000 hombres para detener a los estadounidenses, pero para evitar por lo menos formal y directamente un choque con Estados Unidos, lo catalogaron como un grupo irregular de voluntarios - el "Ejército Voluntario del Pueblo Chino."


A partir del 25 de octubre los chinos ligeramente armados prácticamente aniquilaron lo que quedaba del ejército surcoreano y expulsaron a los norteamericanos de Corea del Norte.


Asombrado por el colapso de lo que parecía una victoria definitiva, el presidente Truman declaró una emergencia nacional y el general MacArthur instó al uso de 50 Bombas nucleares para detener a los chinos. Lo que habría sucedido entonces es cuestión de especulación, pero lo que sucedió fue que MacArthur fue reemplazado por el general Mathew Ridgeway que restauró el equilibrio con fuerzas convencionales. Día a día, la guerra se fue inflamando.


Durante este período y durante los dos años próximos, la fuerza aérea americana llevó a cabo lanzamientos de bombardeo masivos. Algunos de los bombardeos estaban destinados a destruir la capacidad de China y Corea del Norte de seguir luchando, pero Corea es un territorio pequeño y lo que comenzó como "ataques quirúrgicas" se convirtió en un atentado con lluvia de bombas. (Tal bombardeo sería considerado un crimen de guerra como en el Protocolo I de 1977 de los Convenios de Ginebra).


Los ataques fueron enormes. Se lanzaron unas 635.000 toneladas de explosivos y armas químicas, mucho más de lo que se usó contra los japoneses en la Segunda Guerra Mundial. 

Como señaló el historiador Bruce Cummings, la Fuerza Aérea de Estados Unidos encontró que "tres años de lluvia y ruina" habían infligido mayores daños a las ciudades coreanas "que las ciudades alemanas y japonesas incendiadas durante la Segunda Guerra Mundial". Con ese arrase, el general Curtis LeMay pensó que los bombardeos estadounidenses causaron las muertes de alrededor del 20 por ciento - uno de cada cinco - de los norte coreanos. (continuará)



FERNANDO MOYANO - postaporteñ@ 1818 - 2017-09-08 




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