Número 999 | julio 28 de 2013 | Año 8ª
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FRAY MILONGA
Para practicar una política neo-liberal, no-ortodoxa y con puntilla social es absolutamente necesario hacerse el “izquierdista”, sino una parte “de la gilada” se siente molesta, patea y, eventualmente, puede protestar. Todos sabemos que “el Sr. Presidente” ha proclamado a los cuatro vientos, desde antes de ser presidente, su divisa: “Como te digo una cosa, te digo la otra”. O dicho de otra manera “soy reversible” y hasta “multiuso”. El asunto es “estar”, “perdurar” y hasta “joder”. Esa es su función y nadie debe llamarse a engaño. En política, sin embargo, nadie debe juzgar por las declaraciones de un personaje con pretensiones políticas o, con cargos estatales superiores, sino considerar a lo largo del tiempo sus actitudes. El saldo –nadie lo podrá negar- para Mujica es negativo. Mujica es un especialista en eso de “cortes y quebradas”, de anunciar sus buenas voluntades por un lado, y por otro de apegarse estrictamente a la corriente que tiene el sartén por mango y el “mango” también. Aquel o aquellos (el fenómeno de auto-engaño puede ser colectivo) que no quieran ver y observar las cosas, estarán siempre a la búsqueda de un atisbo de que el hombre “en realidad es de izquierda, pero no lo dejan” Él llama a eso “contemporizar” pero en realidad lo que practica es el engaño sistemático de sus electores y al servicio de la conciliación de clases, que es el mantra instalado dentro del Fraude Amplio, sin posibilidades de revertirlo, hasta que la derrota electoral los ponga en la necesidad de examinar de nuevo el problema. Hay también quienes quieren creer en la “ingenuidad” y la “buena fe” de los electores. Es una falacia. La estructura social del Uruguay, no hace de ninguno de nosotros “ingenuos”. Que no nos guste que nos digan las verdades, que cada vez que las verdades están allí y son desagradables, hacemos un mal gesto e inventamos pretextos para no atender lo que se nos señala, es otra cosa. Cada vez que surge un ciudadano, sea éste profesional, intelectual, militante político, simple ciudadano, que señala cuestiones que están mal, que son anacrónicas, contradicciones evidentes, se levantan 10 voces, que salen a interpelar al crítico, que se niegan a oír sus argumentos . “El País de la Cola de Paja” nos definía Benedetti -hace más de cincuenta años!!!- y parapetado en la respetabilidad crítica que daba el ser un asiduo del semanario de Carlos Quijano. El país, el “paisito” no ha cambiado. Peor aún, tiranía mediante y neo-liberalismo practicante a rajatabla, han claveteado en la actual generación la variable facilonga de antes: el “no te metás” ha sido substituido eficazmente por el sencillo “hacé la tuya” Mujica es un formidable intérprete de esa especie de “tartufonismo” nacional. Supera al Sr. Eduardo V. Haedo que, en sus tiempos, supo ser un maestro en los artes y vericuetos de tratar de caer siempre “parado” y que tan bien retrató en una de sus caricaturas Peloduro. No es casualidad, tampoco, que todos ellos tengan orígenes blancos. Los mismos “blancos pillos” de antes. En Cuba, el Sr. Presidente, hace histrionismo, ayudado por cierto por las autoridades cubanas, que están en la difícil situación de aceptar “cualquier cosa”. En otros tiempos, Fidel hubiera aprovechado la coyuntura para ponerlo de azul y grana. Y nos hubiera hecho un favor a todos, pero la situación es tal, que no puede hacerlo, se tiene que “tragar el sapo”. Y Mujica aprovecha –atención!!! con la cobertura de la prensa burguesa uruguaya establecida, no con la del “progresismo”- para repetir su mantra progresista de que la “juventud” nos cegaba, nos hacía avizorar “socialismos” que estaban “a la vuelta de la esquina” y justificar su divisa actual que todo el programa de la izquierda uruguaya se reduce a una justicia social (que ya habíamos alcanzado bajo el batllismo!!!) pero que hoy día se reduce al aforismo presidencial de : “un plato más de guiso para mis negritos” (les guste o no les guste a los negritos, “no tenemos nada más que ofrecerles”). Nos reímos por eso de la fraseología de cierto héroe mediático, que promete pedir perdón público en caso de que en su próxima visita a Obama, se acuerde de solicitar “el cese del bloqueo” y alguna otra cuestión como son los “rehenes de Guantánamo” que ya ha sido tratada públicamente por las cancillerías latinoamericanas y por múltiples foros internacionales. Son –todas esas- frases de circunstancias, especulaciones, que están perfectamente al alcance del “viejo de mierda” que es nuestro primer mandatario, porque a “boquilla” no hay quien le gane desde los viejos tiempos del MLN-Tupamaros, tan longevas que por ese defecto de abrir la boca y “figurarla” se encasquetó él solito el pasar a ser rehén y los padecimientos de “la lata” (que después fue la “escupidera rosada”) cuando se cansaron de verduguearlo por “bocón”. Mujica, le guste o no le guste “al gigante idiota”(acaba de dar el apoyo más voluminoso del frente a la candidatura de Tabaré Vázquez, que es el espaldarazo para su candidatura presidencial mayoritaria en la instancia “interna”) es un “liquidador”. Y el MPP su cómplice, más allá de que eventualmente dentro del mismo existan voces discrepantes, que no logran hacerse oír, ni puedan imponerse. Fue a Cuba, de “oportunista” y para “zafar” de las huelgas de maestros, funcionarios de la Salud y los gremios. Fue a Cuba, porque el acto de la Plaza Independencia mostraba que estaba “solo”, él y todo el gobierno y necesitaba “aire”. En realidad fue a “refugiarse” en Cuba, salir en la foto con Raúl, cenar con Fidel y, poder de esa manera eludir el cerco y con el apoyo del círculo mediático burgués (es el único que lo comenta además de La República). Y desembarcado allí no le queda más recurso que hacer “el espiche” nostálgico y repetir las mismas gansadas y lugares comunes que pregona aquí cuando se pone “lírico y filosófico”. O sea lugares comunes. Aquí recibía a las “damas de blanco” (argumentaba, entonces, que era por “el pedido” de ciertos líderes del “partido nacional” a los que intentaba ganar para su “acuerdo nacional”) en Cuba, no puede hacerlo por motivos obvios de cancillería que el estado cubano no está dispuesto a aceptar y entonces “se adapta”. Siempre, constantemente, la política del camaleón. Al final de su vida, en medio de todos los renunciamientos que ha protagonizado, no le queda más recurso que gobernar “con el piloto automático” (o sea dejar que los “otros” –sus rivales- hagan) y darse el gusto de los “viajecitos” presidenciales a costa del erario público, para satisfacer los berretines de chacarero que nunca vio mundo. Del “sucucho” a la Muralla China, de allí a los pagos vernáculos e ibéricos de un papá que no lo vio crecer. Ahora Cuba, junto al lado de los que se animaron a hacer revoluciones, cuestión que él no se animó, ni siquiera intentar, con el apoyo masivo de su grupo y de la ciudadanía. Lo que contemplamos es un hombre que lo quiere es que pase el tiempo, que contempla angustiado el almanaque y el reloj, ¿cuánto falta para “largar” definitivamente? ¿Cómo lleno el tiempo que falta? ¿Quién me saca de este vacío en el que yo mismo me metí? No hay dios piadoso que se acuerde de él y, si existe, lo condena a cargar hasta el mismísimo final la cruz hasta el Gólgota, definitivo, que lo espera. No hay encuestas (que se hagan públicas) que midan su desprestigio que ya va en bajada pronunciada, después de tantos renunciamientos. Tres años de mandato desperdiciados, todo lo que prometió solucionar, resolver, encarar, en ruinas. Nada hecho, todo resuelto a medias. Y para colmo, mal. Fray Milonga, nos enseña a todos, a dejar de creer –de una buena vez por todas!!!- en “salvadores de ocasión” y “baratitos”. Fray Milonga nos recuerda a todos, que no hay “cambios” que en verdad sacudan las “raíces de los árboles” si no estamos dispuestos a encararlos nosotros mismos con dedicación, tenazmente, con coraje y sin hacernos falsas indulgencias. Fray Milonga nos trae a Tabaré Vázquez, que lo rechazaba porque era un hombre “que decía muchas idioteces” (cuestión en la que tenía toda la razón del mundo). Pasara a la pequeña historia nacional como un farsante y un estafador, junto a otros de su misma laya. Pero quedan muchos Fray Milonga, en el carcaj del Destino, aún éste, el pequeño y nacional. Esperemos que no echemos el ejemplo en saco roto, por el fondo del cual se escabullan, también, los otros Fray Milonga, que esperan turno.
c.e.r.
- postaporteñ@ 999 - 2013-07-28 |
NO MIENTAS Gabriel Molina!!!!
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Resistencias a la megamineria,
el agronegocio y
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FRENTEAMPLISTAS POR
UN DEBATE PROGRAMÁTICO
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26 de Julio 2013-
Los
compañeros no sectorizados de Frenteamplistas por un Debate Programático
saludamos al Frente Amplio en la presencia de los integrantes del panel,
reafirmando la vigencia de la Declaración Constitutiva:
“la
construcción de una sociedad justa, con sentido nacional y progresista,
liberada de la tutela imperial es imposible en los esquemas de un régimen
dominado por el gran capital. La ruptura con ese sistema es una condición
ineludible de un proceso de cambio de sus caducas estructuras y de conquista
de la efectiva independencia nacional”..
.
Somos
conscientes que el mundo ha cambiado del 71 hasta acá, pero nacimos como una
fuerza transformadora y queremos seguirlo siendo, no resignarnos a maquillar
el sistema. Cada nueva situación, la estudiaremos con rigor científico
anclados en la realidad.
En
materia económica, ser
de izquierda es incompatible con defender el libre mercado.
Sólo la derecha puede decir, y trata de imponerlo como paradigma, que el
mercado libre es el mejor asignador de los recursos económicos
.El
Estado no debe ser un espectador sino protagonista fundamental del
desenvolvimiento económico y social.
Queremos
un FA que se presente a la ciudadanía con una nítida propuesta de izquierda,
que no acepte las desigualdades como algo natural o inevitable, conscientes de la necesidad de
revertir el sistema, para construir una patria solidaria, con libertad,
igualdad, bienestar, cultura y amplia participación social.
Ante
la crisis del sistema capitalista que se muestra en el mundo desarrollado, la
conducta de las trasnacionales, de los organismos internacionales y de los
gobiernos de las grandes potencias, sostenemos que es imprescindible para la
liberación nacional de los países de América Latina y la liberación
social de las clases y capas populares, la acción tendiente a
fortalecer el Mercosur y la integración latinoamericana, y enfrentar los planes de dependencia
como el ALCA o la versión revivida de aquélla, la Alianza del Pacífico
y los convenios militares con EE.UU.
Algunos
quieren que seamos socios y cómplices, pero la triste realidad de las
acciones sobre el Presidente Evo Morales, demuestran que el imperialismo
cambia su rostro pero no sus métodos.
Trabajamos
para que el FA se proyecte en defensa de los trabajadores, de los pequeños y
medianos propietarios de la ciudad y el campo, de los cooperativistas,
de las empresas auto-gestionadas, de los jubilados y pensionistas, de los
estudiantes, de los componentes del bloque social alternativo al dominio de
la burguesía trasnacional y de sus asociados nacionales.
Por
una orientación económica atenta a las necesidades populares, que
acote los márgenes de ganancia del gran capital, que permita al FA volver a
ser vocero de las luchas obreras y populares que vibran en las calles,
campos, barrios y sindicatos, consciente de que el poder dominante no se
doblega sólo con medidas de gobierno a menos que estén respaldadas por la
movilización popular. Ningún cambio importante se podrá obtener sin dicha
movilización, tal como lo demuestra la historia reciente.
Una
propuesta de izquierda evitará gobiernos divorciados con vallas de la
sociedad, “soluciones” electorales de “ganar” como sea, trasmitiendo mensajes
conservadores, maniatados en los estrechos márgenes que el sistema ofrece a
los pueblos.
Queremos
ganar el gobierno pero para transformar las estructuras inalteradas de
poder, tales como la propiedad de la tierra, de los medios masivos de
comunicación, de fuerzas armadas cerradas en defensa de la impunidad,
de jueces y Suprema Corte de Justicia levantados como murallas a los reclamos
del pueblo.
El
compromiso de los militantes, dirigentes y representantes en los cargos
políticos, debe ser con el programa, con la unidad, la participación y una
ética de izquierda y de austeridad.
Sabemos
de compañeros independientes, partidos históricos, agrupamientos del interior
y sectores del fa, intelectuales, trabajadores y estudiantes, que comparten
muchas de nuestras inquietudes.
Hoy
sumamos nuestras modestas fuerzas en la dirección de construir en el FA, un
espacio de izquierda con estos contenidos, que permitan la
expresión y participación de un amplio sector de la militancia, que fortalezca la fuerza política
para el seguimiento de la aplicación del programa y del que surja un
precandidat@ comprometid@ con estas bases fundamentales.
En
el camino a esa construcción, los invitamos a la próxima conferencia que
realizaremos con los compañeros de Alternativa, como un aporte hacia el
congreso programático de noviembre
Nuestra próxima
actividad:
"¿Es posible otra política económica
de izquierda?
¿Cuál debe ser la relación del gobierno, fuerza
política y movimiento social en el nuevo período?
Sábado 17 de agosto Hora 15
FDP- ALTERNATIVA
Frenteamplistas por un Debate Programático
http://www.peticiones24.com/primero_el_programa Blog: http://frenteamplistasporundebateprogramatico.wordpress.com
FDA - postaporteñ@ 999 - 2013-07-28 12:34:54
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Postalinas y Chamuyos
Informamos que el día
viernes, 26 de Julio de 2013, falleció la compañera HERMINIA SANTANA en
Montevideo, a los 83 años de edad. |
EL CONSUMISMO ATURDIDO
por Juan Luis Berterretche “Aparentemente, el consumo es un hecho banal, incluso trivial. Todos lo hacemos a diario...” “Pero la mayor parte del tiempo consumimos de hecho, se diría que rutinariamente y sin demasiada planificación y sin pensarlo dos veces. En realidad, si se lo reduce a su forma arquetípica en tanto ciclo metabólico de ingesta, digestión y excreción, el consumo es una condición permanente e inamovible de la vida y un aspecto inalienable de ésta, y no está atado ni a la época ni a la historia. Desde ese punto de vista, se trata de una función imprescindible para la supervivencia biológica que nosotros, los seres humanos, compartimos con el resto de los seres vivos, y sus raíces son tan antiguas como la vida misma.” /1 Pero en el momento que el capital no sólo separa el valor de uso del producto -que corresponde a la necesitad humana de él-, del valor de cambio -que es el valor que adopta el producto en el mercado-, sino que también subordina nuestras necesidades al valor que se puede realizar en el mercado, el consumo adquiere un sentido diferente e incluso opuesto a su inicial destino de garantizar la sobrevivencia biológica humana. El consumo subordinado al lucro del Capital, ya ha puesto en peligro la existencia del planeta y de nuestra especie.
La Huella Ecológica
De la misma manera el crecimiento ilimitado de la demanda de materias primas y alimentos que la economía capitalista exige para su paradigma de “progreso”, conduce a una destrucción cada vez mayor de los recursos naturales. La Huella Ecológica analiza las demandas humanas sobre la biosfera comparando el consumo de la humanidad con la capacidad regenerativa de la Tierra, o biocapacidad. Se formula calculando el área requerida para producir los recursos que consume la gente, el área ocupada por infraestructuras y el área de bosques que se necesita para secuestrar el CO2 que no es absorbido por los océanos. Todas las actividades humanas utilizan tierra biológicamente productiva y/o zonas pesqueras. La Huella Ecológica es la suma de estas áreas, independientemente de su situación en el planeta. La Huella Ecológica no incluye directamente el uso de agua; sin embargo, esto es algo intrínseco a la biocapacidad, puesto que la falta de agua o el agua contaminada tiene un impacto directo sobre la disponibilidad y estado de la biocapacidad. Tanto la Huella Ecológica como la biocapacidad se expresan en una unidad común denominada hectárea global (hag), donde 1hag representa una hectárea biológicamente productiva de tierra de productividad media. En 2008 la biocapacidad total de la Tierra era de 12.000 millones de hag (1,8 hag por persona), mientras que la Huella Ecológica de la humanidad era de 18.200 millones de hag (2,7 hag por persona). /2 Desde los años 70, la demanda anual de la humanidad sobre el mundo natural ha superado lo que la Tierra puede renovar en un año. Esta “translimitación ecológica” ha seguido creciendo con los años, alcanzando un déficit del 50 por ciento en 2008. Esto significa que la Tierra tarda 1,5 años en regenerar los recursos renovables que utiliza la gente y en absorber el CO2 que producen ese mismo año. ¿Cómo es posible esto si solo hay una Tierra?...Ahora es frecuente que la gente cambie de fuente de recursos cuando pasa esto; sin embargo, con las actuales tasas de consumo, estas fuentes dejarán también de dar recursos y algunos ecosistemas colapsarán antes incluso de que se terminen completamente. Las consecuencias del exceso de gases de efecto invernadero que no pueden ser absorbidos por la vegetación se están notando ya, con los aumentos de los niveles de CO2 atmosférico que provoca un aumento de las temperaturas globales, cambio climático y acidificación de los océanos. /3 El ejemplo más destacado de “translimitación ecológica” es el de EEUU. Si todos los pobladores del mundo consumieran recursos como un ciudadano estadounidense, se necesitarían 4 planetas para regenerar todos los años la demanda de la humanidad.
Del consumo elitista al consumo de masas
En el mismo año de la caída del muro de Berlín, D. Harvey editó La Condición Posmoderna /4 un libro que codificó los enormes cambios económicos-sociales-políticos-culturales de las últimas décadas. Superando la visión esclerosada de la mayoría de los sociólogos y economistas predominantes de esos años, abrió un camino de interpretación sobre el nuevo fenómeno de la posmodernidad, permitiendo empezar a entender las modificaciones en los mercados de trabajo, de mercancías y de capitales, que condujeron hacia una nueva modalidad de acumulación de capital y como consecuencia a un cambio cultural y a la predominancia de una nueva subjetividad sometida al consumismo irresponsable. Para Harvey las transformaciones de las últimas décadas manifestadas en todos los planos de la sociedad se corresponden con profundas modificaciones en el sistema de producción, que pueden ubicarse temporalmente en los inicios de la década del setenta. Más precisamente, él señala a 1973 -año de recesión generalizada a nivel mundial- como el punto de inflexión de estos cambios. Afirma que se abre un nuevo período de acumulación de capital -o de incremento en el valor del capital- que él denomina Acumulación Flexible. /5 Esta nueva forma de acumulación de capital vino a sustituir al fordismo-keynesianismo, que combinó innovaciones tecnológicas impuestas por esta modalidad de producción (línea automática de montaje) y organizacionales (forma corporativa de organización de negocios, separación entre gerencia, concepción, control y ejecución y detallada división del trabajo) con cambios en los modos y mecanismos de intervención estatal permitiendo atender en forma efectiva los requisitos de la producción fordista. El reconocimiento explícito por el fordismo de que producción de masas significaba consumo de masas, lo hizo introducir la jornada de ocho horas con un pago de cinco dólares, estableciendo un nuevo sistema de reproducción generacional de la fuerza de trabajo. Y también un nuevo modelo de consumo que abarcó nuevas capas y clases sociales. Todo esto condujo, al decir de Harvey, a "una nueva estética y una nueva sicología, en suma un nuevo tipo de sociedad democrática, racionalizada, modernista y populista". La configuración y el uso propio de los poderes del Estado sólo fueron resueltos después de 1945. Desde ese momento el fordismo se alió firmemente al keynesianismo. El fordismo, entonces, combinado con la administración económica keynesiana, produjo lo que dio en llamarse estado de bienestar social (welfare state) en los países capitalistas avanzados. Es ésta la base de un largo período de expansión económica pos guerra.
Del consumo de masas al consumismo aturdido
Rigidez en los mercados, en la localización y en los contratos de trabajo. Resistencia de los trabajadores a toda tentativa de superar estos problemas de rigidez que llevaron a las grandes huelgas de 1968-1972. Rigidez en los compromisos del Estado por aumento de los programas de asistencia social en momento que la rigidez en la producción restringía expansiones de la base fiscal para gastos públicos. El único instrumento flexible que tenían los estados estaba en la política monetaria, imprimir moneda para estabilizar la economía. El resultado fue una onda inflacionaria que acabó con la expansión pos guerra. La recesión generalizada de 1973 dejó a las corporaciones con mucha capacidad excedente inutilizable, en condiciones de acentuación de la competencia. Esto obligó a abrir un período de racionalización, reestructuración y aumento del control del trabajo. La mudanza tecnológica, la automatización, la búsqueda de nuevas líneas de productos y nichos de mercado, la dispersión geográfica para zonas donde se podían imponer condiciones de trabajo más rigurosas y las fusiones y medidas para acelerar el tiempo de giro del capital, pasaron al primer plano de las estrategias corporativas de sobrevivencia en condiciones generales de deflación /6. En consecuencia las décadas del setenta y ochenta fueron un conturbado período de reestructuración económica y reajuste social y político, que continuó en los años siguientes. En el espacio social creado por todas esas oscilaciones e incertezas, una serie de nuevas experiencias en los dominios de la organización industrial y de la vida social y política comenzó a tomar forma. Esas experiencias pueden representar los primeros ímpetus del pasaje para un régimen de acumulación de capital enteramente nuevo, asociado con un sistema de regulación política y social bien distinta. El mercado de trabajo pasó por una radical reestructuración. La desocupación -gran cantidad de mano de obra excedente tanto de desempleados como subempleados- y precarización del trabajo y el debilitamiento del poder sindical fueron aprovechados para imponer "regímenes y contratos de trabajo más flexibles". Lo mismo que el traslado de las plantas de producción a zonas con menos exigencias salariales o de beneficios sociales. Y lo que es más importante "una reducción del empleo regular (formal) en favor del creciente uso del trabajo en tiempo parcial, temporario o subcontratado (o tercerizado)"..."Las economías de fines determinados derrotaron a las economías de escala." La industria debió adaptarse a la producción en pequeños lotes. "Estos sistemas de producción flexible permitieron una aceleración del ritmo de innovación del producto, al lado de la exploración de nichos de mercado altamente especializados y de pequeña escala."..."El tiempo de giro (del capital) -que siempre es una llave de la lucratividad del capital- fue reducido de modo dramático por el uso de nuevas tecnologías productivas (informática y programación, automatización, robots) y de nuevas formas organizacionales (como el sistema de gerenciamiento de estoques 'just-in-time', que disminuye la cantidad de materia prima necesaria para mantener la producción fluyendo en forma continua).” Pero la aceleración del tiempo de giro en la producción hubiera sido inútil sin una reducción del tiempo de giro en el consumo. La vida media de un producto fordista típico, por ejemplo, era de cinco a siete años, pero la acumulación flexible disminuyó ese tiempo, en un primer momento a menos de la mitad en el sector textil o vestuario. Hoy en esas ramas –en los grandes mercados de consumo- la vida media se mide en meses y aún en semanas), mientras que en otros sectores -hardware, software, videogames, telefonía móvil, MP3, MP4, MPn, , etc.- la obsolescencia se alcanza antes de los dieciocho meses y para los tablet e i-Pad, los lanzamientos de nuevos modelos son cada 12 meses. La acumulación flexible fue acompañada en la punta del consumo, por una atención mucho mayor a las modas fugaces y por la movilización de todos los artificios de inducción de necesidades ficticias -con apoyo de la publicidad- y de la transformación cultural que eso implica. La estética relativamente estable del modernismo fordista cedió lugar a todo el fermento, inestabilidad y cualidades huidizas de una estética posmoderna que celebra la diferencia y en especial lo efímero en términos de utilización de mercancías, de apetitos y aspiraciones individuales, así como en el espectáculo, la moda y la mercantilización de las formas culturales. El mundo capitalista se zambullía en el consumismo aturdido concerniente a la crisis estructural crónica del capital, en su etapa senil. Como lo define Z. Bauman respecto al individuo: “Se puede decir que el 'consumismo' es un tipo de acuerdo social que resulta de la reconversión de los deseos, ganas o anhelos humanos (si se quiere 'neutrales' respecto del sistema) en la principal fuerza de impulso y de operaciones de la sociedad, una fuerza que coordina la reproducción sistémica, la integración social y la formación del individuo humano, así como también desempeña un papel preponderante en los procesos individuales y grupales de auto-identificación, y en la selección y consecución de políticas de vida individuales.” /7
La tasa de utilización decreciente
Su formulación de la ley tendencial de la tasa de utilización decreciente y la ubicación del rol del complejo industrial-militar en la economía capitalista actual son dos significativos aportes que nos esclarecen respecto a la crisis estructural crónica del capital en su etapa senil. La primera rige el consumo individual y social; y el nuevo rol del complejo industrial-militar se impone como determinante en el consumo estatal. La tasa de utilización decreciente es una de las leyes tendenciales más importantes que engloban el desenvolvimiento del capitalismo. Tiene como condición sine qua non y origen directo, la separación del trabajador de sus medios de producción (herramientas, maquinaria, materias primas e instalaciones) y la conversión de esos medios en capital. No podemos extendernos en los atributos y el desarrollo de este proceso que llevó centenares de años y sólo resaltaremos que realizada la separación del trabajador de sus medios de producción, los objetivos de la producción ya no están directamente atados y subordinados a las limitaciones de un consumo determinado. A partir de ese momento la producción puede anticiparse al consumo e imponer una “demanda mayor, conducida no por las necesidades reales de uso del producto, sino por la oferta de ese producto en el mercado.” De esta forma la producción remueve los antiguos obstáculos al consumo y a través de la oferta, adopta un papel “activo/estimulador” de la demanda y con el pasar del tiempo, crecientemente manipulador de ella. Como contrapartida: “la remoción de los antiguos obstáculos al consumo, en relación a la demanda, para el capital también significa simultáneamente la pérdida de su capacidad de poner límites a sus propios procedimientos productivos (que en los sistemas de producción más antiguos eran circunscritos por la demanda equivalente al uso directo), evitando hundirse en la inactividad y la crisis” Por eso como contrapartida de la subordinación del valor de uso al valor de cambio tenemos las crisis de sobreproducción cuando la oferta de mercancías no logra realizarse en el mercado. Como es evidente, no se trata de sobreproducción respecto a las necesidades humanas sino a las posibilidades del consumidor de adquirir el producto en el mercado. Por ejemplo: “sobreproducción” de alimentos que puede convivir con hambrunas o sobreproducción de viviendas que coexiste con millones de “sin techo”. La innovación de subordinar el valor de uso del producto, al valor que se puede obtener en el mercado, se basa en la percepción “de que cualquier mercancía, en un extremo de la escala, puede estar constantemente en uso o, en el otro extremo de las posibles tasas de utilización, absolutamente nunca ser usada, sin perder con eso su utilidad en lo que se refiere a las exigencias expansionistas del modo de producción capitalista.”/9 “Como resultado, nuevas potencialidades productivas se abren al capital, cuyo sistema no sufrirá cualquier consecuencia si la relación de alguien con un producto dado, es caracterizada por la tasa de utilización mínima o máxima, pues esa tasa no afecta en absoluto la única cosa que realmente importa desde el punto de vista del capital: que una cierta cantidad de valor de cambio sea realizada en la mercancía en cuestión, a través del propio acto de venta, independientemente de ser ella sujeta a uso constante, a poco, o a ningún uso conforme el caso. El capital define “útil” y “utilidad” en términos de vendible, un imperativo que puede ser realizado bajo la hegemonía y el dominio del propio valor de cambio.” /10 O dicho de otra forma por Marx: “el valor de cambio de una mercancía no aumenta si su valor de uso es más consumido y con mayor provecho"./11 Es quizá esta afirmación de Marx en El Capital, la que fundamenta la ley tendencial de la tasa de utilización decreciente formulada por Mészáros. “Por el contrario -afirma Mészáros- cuanto menos una mercancía es realmente usada y re-usada (en vez de rápidamente consumida, lo que es perfectamente aceptable para el sistema) mejor es desde el punto de vista del capital: ya que tal subutilización torna vendible otra pieza de mercancía.” “De hecho esa tendencia a reducir la tasa de utilización real ha sido precisamente uno de los principales medios por los cuales el capital consiguió alcanzar su crecimiento inconmensurable en el curso del desenvolvimiento histórico.”/12 La subutilización de los productos se impone por la manipulación de la demanda (publicidad y prédica cotidiana de los grandes medios), los imperativos de la moda, la obsolescencia programada /13, o inducida para la mayoría de las mercancías y la creación de necesidades ficticias, entre otros mecanismos. Cuánto más efímera es la utilización de un producto, cuánto más fugaz es su pasaje por el mercado, mejor para el funcionamiento de la economía capitalista. Con las consecuencias de despilfarro de materias primas y de horas de trabajo que esto implica y con el crecimiento exponencial del desperdicio y el aumento geométrico de la producción de basura y chatarra. La tasa de utilización decreciente se evidencia en la producción de bienes y servicios tanto como en la producción de bienes de producción (maquinaria e instalaciones). “Paradojalmente, cuanto mayor la magnitud del capital dedicado a los medios de producción... tanto mayor es la presión para suplantarlo por una magnitud siempre creciente de capital destinado al mismo tipo de existencia...”/14. Dicha tasa se expresa en la fábrica en forma de subutilización crónica acoplada a una presión creciente para acortar el ciclo de amortización de la maquinaria. En relación al propio trabajo vivo la tasa de utilización decreciente asume, con el pasar del tiempo, la forma de desempleo creciente. La técnica y la ciencia realizan la doble tarea de “inventar más y más maquinaria productiva eficaz en relación al costo, lo que quiere decir, primordialmente economizadora de trabajo, y de encontrar los métodos y procesos adecuados para la lucrativa producción en masa de mercancías.”/15 La expansión de la agro-industria y la minería a cielo abierto en Latinoamérica utiliza nueva y mayor cantidad de maquinaria desplazando el trabajo vivo tanto en la agricultura como en la minería. La ciencia y la tecnología lejos de tener un sentido neutro está subordinada a la acumulación de capital y por tanto, sus objetivos se expresan en la búsqueda del cumplimiento de la tasa de utilización decreciente. En la tasa de utilización decreciente confluyen las tres mercancías, tanto los bienes y servicios, como los bienes de producción, como la mercancía trabajo. Mészáros lo sintetiza de esta forma: “...cuanto más el modo establecido de producción y consumo pueda aproximarse a la tasa cero de uso, habiendo removido completamente el ‘trastorno disfuncional’ (...) del consumo real, mayor alcance se confiere automáticamente por esta aproximación a la producción continua y la expansión ilimitada. No importa cuán absurda pueda ser la suposición en sus implicaciones finales (...) Siendo así, el objetivo y el principio orientador de la producción se tornan: cómo asegurar la máxima expansión posible (y el correspondiente lucro) sobre la base de una tasa de utilización mínima que mantenga la continuidad de una reproducción ampliada”/16.
Perspectivas
Esto implica reducir la huella ecológica y llevarla de 1 ½ planeta actual a 1; reorientar los flujos financieros recompensando la gestión sostenible de los recursos y la innovación; producir mejor reduciendo insumos y desechos en la producción y aumentando la generación de energía renovable; distribuir con equidad los recursos y abandonar el PBI como medida privilegiada de desarrollo de los países; y consumir de forma más responsable cambiando el estilo de vida, mudando el modelo energético y promoviendo el consumo humano saludable. Es una perspectiva loable y también inalcanzable bajo el sistema capitalista. Pero imprescindible en un programa social-político de transformaciones radicales. El Capital es sinónimo de más desocupación, desigualdad y pobreza y una mayor destrucción ambiental. Las perspectivas que tiene el capitalismo para nuestro planeta: son acelerar cada vez más el giro del capital en la producción y acumulación, centrar los flujos financieros en la especulación y el fraude, despilfarrar las riquezas naturales comunes e incentivar la generación de desechos de todo tipo, empeorar la matriz energética global con nuevas tecnologías más destructivas -como el fracking-, deteriorar la alimentación mundial con la expansión de las semillas transgénicas y todo tipo de organismos genéticamente modificados y empeorar la salud global a través de la actual industria de la alimentación y del monopolio de la medicina por las transnacionales de los laboratorios. Y está implícito en su dinámica actual acelerar el vértigo del consumismo atolondrado e irresponsable. Aunque aún el consumismo aturdido pueda confundir por períodos a nuestras poblaciones, décadas de sacrificios y luchas han hecho que nuestro continente tenga, como ningún otro, miles de movimientos sociales y social-políticos confrontando en la actualidad, en distintos niveles, todas esas lacras que impulsa el capital. Para aquellos individualistas fanáticos que han abrazado al consumismo como su medular filosofía de vida les advierto con un aforismo de Heráclito de Éfeso /17: “La compulsión por satisfacer todos nuestros deseos, se paga con pedazos del alma.” Notas 1/ Zygmunt Bauman, Vida de consumo, Trad. de M. Rosenberg y J. Arrambide, FCE, México, 2007, p. 44 y siguientes. 2/ Planeta Vivo, Informe 2012. Biodiversidad, biocapacidad y propuesta de futuro.WWF. p.40. Ver en: http://d3nehc6yl9qzo4.cloudfront.net/downloads/informe_planeta_vivo_2012.pdf 3/ Ibíd. p. 42. 4/ David Harvey The Condition of Postmodernity - Basil Blackwell Ltd. 1989. Todos los entrecomillados de este subtítulo y el siguiente pertenecen al libro mencionado. 5/ Otros autores ampliaron y enriquecieron el concepto de flexibilidad en la producción capitalista enunciado por Harvey. Podemos mencionar a Tony Smith en La Production Flexible: une Utopie Capitalista? Cahier d’étude et de recherche Nº 23, Institut International de Recherche et de Formation, 1996 y Alain Bihr en La Novlangue Néolibérale (La rhétorique du fétichisme capitaliste) capítulo sobre la Flexibilité (p.61) Cahiers libres, Editions Page deux, 2007. Por su parte Richard Sennett en La corrosión del carácter, (Editorial Anagrama, Barcelona 2000.) desarrolla los estragos en el carácter de las personas, de la nueva forma flexible de producción. 6/ La deflación es la caída generalizada del nivel de precios de bienes y servicios en una economía. Es el movimiento contrario a la inflación. 7/ Zygmunt Bauman, Ibíd. 8/ István Mészáros, Beyond Capital, Towards a Theory of Transition, Merlin Press, Londres, 1995. Las citas entrecomilladas en este subtítulo pertenecen a la versión en portugués del libro de Mészáros: Para Além do Capital, Editorial Boitempo, Sao Paulo, 2002. 9/ István Mészáros, Para Além do Capital. p. 660. 10/ Ibíd. p. 660-661. 11/ Karl Marx O Capital, São Paulo, Abril Cultural, 1983 v. 1/1, p. 282. 12/ Mészáros, Ibíd. p. 661. 13/ Para entender la obsolescencia programada ver el documental de Cosima Dannoritzer Comprar, tirar, comprar, en: http://www.rtve.es/alacarta/videos/el-documental/documental-comprar-tirar-comprar/1382261/ 14/ Mészáros, Ibíd. p. 665. 15/ Ibíd. p. 668. 16/ Ibíd. p. 684. 17/ Heráclito de Éfeso, filósofo griego, nació hacia el año 535 A.C. y falleció hacia el 484 A.C.
JL.BERTERRECHE - postaporteñ@ 999 - 2013-07-28
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Cumplir con las recomendaciones
de la INDDHH
El pasado 6 de diciembre la Institución Nacional de Derechos Humanos y Defensoría del Pueblo (INDDHH) se dirigió al Presidente de la República recomendándole el envío a la brevedad, dadas las restricciones constitucionales, de una nueva ley que solucione las insuficiencias y carencias de las leyes reparatorias que se aprobaron durante el gobierno anterior. Para la INDDHH tienen carencias que a su entender violentan las normas de DDHH que nuestro país ha ratificado a nivel internacional y que están vigentes en la jurisprudencia actual. La recomendación formulada por la INDDHH tiene dos aspectos que merecen resaltarse. La administración del Dr. Tabaré Vázquez fue la que mayor impulso dio al cumplimiento de las obligaciones del Estado con respecto al debido resarcimiento de las víctimas por los sufrimientos y daños ocasionados por el accionar represivo del terrorismo estatal, dentro y fuera de las fronteras nacionales en el período del pasado reciente. Las diferentes leyes aprobadas en este aspecto son elocuentes y no merecen ninguna duda al respecto. Los sucesivos gobiernos que tuvo Uruguay desde el restablecimiento de la institucionalidad democrática apostaron a la impunidad para los golpistas, torturadores y asesinos y nunca se preocuparon por resarcir a cabalidad a las víctimas, cuyo sufrimiento incluso negaron y/o minimizaron. Al mismo tiempo, la INDDHH puso de manifiesto que a 40 años del golpe de Estado perpetrado por la mayoría del Partido Colorado o con la aquiescencia de ella y de un sector minoritario del Partido Nacional y a casi 30 años del retorno a la democracia, el Estado uruguayo aún no ha cumplido a cabalidad con sus obligaciones en cuanto a reparar a las víctimas del terrorismo de Estado, específicamente en lo que se refiere a las personas que estuvieron detenidas, sufrieron torturas, fueron juzgadas arbitrariamente por tribunales militares y permanecieron privadas de su libertad en centros de reclusión diseñados para la destrucción. Aunque a nivel de la ciudadanía, incluso a nivel de las autoridades de gobierno, parlamentarios, dirigencia de los partidos políticos y del movimiento sindical, existe la creencia de que los expresos políticos ya fueron reparados, la realidad es diferente tal como lo señala el pronunciamiento de la INDDHH. No todos los expresos políticos fueron reparados, incluso decenas de ellos que fueron formalmente procesados por la justicia militar y permanecieron más de una década privados de su libertad, en las peores y más duras condiciones, carecen injustamente del derecho a percibir el beneficio del Artículo 11 de la Ley 18 033 (Pensión Especial Reparatoria, PER). Los expresos políticos que habiendo sido procesados formalmente por la justicia militar, a los cuales incluso se les aplicó con retroactividad la Ley de Seguridad del Estado, si fueron liberados antes del 9 de febrero de 1973 no tienen derecho a dicho beneficio. Tampoco pueden acceder al mismo y por ello tampoco fueron reparados aquellos expresos políticos cuyos ingresos, de cualquier naturaleza, son superiores a más de 15 BPC, como resultado de sus actividades actuales tanto en el ámbito privado o público. Lo mismo ocurre con todos aquellos que habiendo finalizado su inserción laboral tienen jubilaciones superiores al beneficio establecido por la PER. Al mismo tiempo, la redacción dada por la Ley 18 033 a las condiciones necesarias para percibir la pensión reparatoria hace incompatible el cobro de la misma con otros legítimos ingresos que pudieran percibir los expresos políticos como resultado de su trabajo o el de sus cónyuges durante décadas: las jubilaciones y las pensiones de sobrevivencia. La resolución de la INDDHH es clara y terminante, no admite dos lecturas. Las personas que durante el terrorismo de Estado sufrieron graves violaciones a los DDHH tienen dos clases de derechos, de diferente naturaleza, que deben ser abordados por el Estado para cumplir con la normativa legal: los derechos propios, comunes a todas las personas y los derechos inherentes a las víctimas de graves violaciones tal como lo establece la Resolución 60/147 de la Organización de las Naciones Unidas. Hasta tanto el Estado no cumpla a cabalidad con sus obligaciones en todos los aspectos, inclusive los REPARATORIOS, la transición democrática, iniciada en marzo de 1985 no habrá finalizado y la democracia tendrá heridas abiertas El Estado uruguayo debe cumplir con la normativa de DDHH, debe resarcir a las víctimas del terrorismo de Estado, aunque hayan pasado varias décadas de dichos sucesos. La recomendación de la INDDHH al respecto señala el camino que el Poder Ejecutivo debe transitar, Parlamento mediante, antes del 25 de octubre. Han pasado varios meses y los plazos se agotan: el tiempo apremia
CRYSOL
- postaporteñ@ 999 - 2013-07-28 |
El General sí Tiene quién le Escriba
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lunes, 29 de julio de 2013
999* En la Azotea de Haedo tomó mate el Che en el Quincho de Varela Julissa toma vino
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